MARÍA ELENA WALSH
(1930-2011)
Nació el 1 de febrero de 1930 en Ramos Mejía, Buenos Aires. Cursó estudios en la Escuela Nacional de Bellas Artes. Desde 1945 publica sus primeros versos en la revista El Hogar, Sur y el diario La Nación. En 1947 editó su primer libro, Otoño imperdonable. En 1948, viajó a los Estados Unidos y en 1952 se radica en París, donde junto a Leda Valladares difunden el folclore argentino.
Desde 1959 trabaja como guionista para televisión, escribe obras de teatro y canciones para niños como Canciones para mirar, Doña Disparate y Bambuco. Sus canciones forman parte del bagaje cultural de los mayores y de los chicos. Muchas bibliotecas escolares llevan su nombre. Sus libros: El reino del Revés, Tutú Marambá, Zoo Loco, Dailan Kifki, Chaucha y palito, Los Poemas y Novios de antaño, entre otros fueron traducidos a otros idiomas. La editorial Alfaguara de Argentina lanzó en septiembre de 2000, la colecciónAlfaWalsh que reúne toda la obra infantil de la escritora argentina.
Recibió el Premio Municipal de Poesía, el Gran Premio de de Honor de SADAIC y el del Fondo Nacional de las Artes, entre otros. Doctora Honoris Causa de la Universidad Nacional de Córdoba.
María Elena Walsh falleció el 10 de enero de 2011 a los 80 años en Buenos Ai
Fonte: http://www.buscabiografias.com/
Veja também: POESIA INFANTIL de María Helena Walsh
Balada del tiempo perdido
"Yo dormía pero mi corazón velaba..."
Cantares
Como a sus vanas hojas
el tiempo me perdía.
Clavada a la madera de otro sueño
volaban sobre mí noches y días.
Poblándome de una
nostalgia distraída,
la tierra, el mar, me entraban en los ojos
y por ociosas lágrimas salían.
Cuántos papeles ciegos
en la tarde vacía.
Qué multitud de imágenes miradas
como a través de una mortal llovizna.
Entorpecidas sombras
en vez de manos mías,
de tanto enajenarse en los espejos,
todo lo que tocaba se moría.
Memorias y esperanzas
callaban su agonía:
un porfiado presente demoraba
siempre las mismas ramas amarillas.
Qué tiempo sin sentido
el que mi amor perdía.
Qué lamentable primavera inútil
haciendo en vano flores que se olvidan.
Pero mi corazón
velaba y no sabía.
Recuperada su pasión secreta
ahora enamorado resucita.
Y el tiempo que hoy me guarda
entre sus hojas vivas
es un tiempo feliz desde hace tantos
sueños que nacerán en la vigilia.
Balada do tempo perdido
"Eu dormia mas meu coração velava..."
Cantares
Como a suas folhas vãs
o tempo se me ia.
Cravada à madeira de outro sonho
voavam sobre mim noites e dias.
Povoando-me com uma
saudade distraída,
a terra, o mar, entravam por meus olhos
e por ociosas lágrimas saíam.
Quantos papéis cegos
nesta tarde vazia.
Que multidão de imagens vistas
como através de uma chuva mortal.
Sombras entorpecidas
em vez de minhas mãos,
de tanto alhear-se nos espelhos,
tudo o que toca então morria.
Memórias e esperanças
silenciavam sua agonia:
um obstinado presente demorava
sempre os mesmos ramos amarelos.
Que tempo sem sentido
o que meu amor perdia.
Que lamentável primavera inútil
criando em vão flores que esquecemos.
Mas o meu coração
velava e não esquecia.
Recuperada sua paixão secreta
agora apaixonado ressuscita.
E o tempo que agora me guarda
entre suas folhas vivas
é um tempo feliz desde tantos
sonhos que hão de nascer na vigília.
WALSH, María Elena. Otoño imperdonable. Buenos Aires: Seix Barral, 1998. 84 p. 15X24 cm.
ESENCIA
Indefinible esencia
BÉCQUER
Nunca nombrarla/nunca.
Ni callarla siquiera.
Solamente crecer de sus raíces
con asombrado llanto.
Ser y morir tan sólo
para justificarla
como naturaleza
y sumisa costumbre.
Madurará con pausa
y exactitud de necesaria estrella
y sólo incertidumbres
me probarán su órbita,
su doloroso amor, su cumplimiento.
Será un desgarramiento
elemental, constante.
Desesperada espera
—lo sé— desesperada.
Y sin embargo, nada
persistirá más cierto
que su sabiduría,
que sus sencillas fiestas.
Como el rosal seguro de la rosa.
Y yo seré la sombra
de su florecimiento,
yo viviré acatando
su voz y su silencio,
en indefensa tierra,
irrenunciablemente.
ESSÊNCIA
Indefinível essência
BÉCQUER
Nunca nomeá-la, nunca.
Nem calá-la tampouco.
Somente crescer de suas raízes
com assombrado pranto.
Ser e morrer apenas
para justificá-la
como natureza
e submisso costume.
Amadurecerá com a pausa
e exatidão de necessária estrela
e apenas incertezas
vão me provar sua órbita.
seu doloroso amor, seu cumprimento.
Será um desgarramento
elemental, constante.
Desesperada espera
— já sei — desesperada.
E no entanto, nada
persistirá mais certo
que sua sabedoria,
que suas simples festas.
Como o roseiral seguro da rosa.
E eu serei a sombra
de seus florescer,
eu viverei acatando
sua voz e seu silêncio,
em terra indefesa,
irrenunciavelmente.
TRÁNSITO
Crepúsculo que me anuncia
un tiempo de soledad.
He recuperado el llanto
en mi espera elemental.
Es en vano el plenilunio,
la paloma y el rosal:
soy forastera en el ámbito
de esta dulzura sin par.
No sé qué hacer con mis ojos
inmigrantes. No sé ya
cómo habré de arrepentirme
de silencio tan fatal,
de mi bautismo de sombra
frente a tanta claridad.
Nube, pájaro, legumbre,
ay, no quisiera llevar
a sus cálidas presencias
mi cofre de hielo y sal
Verano, clima de ausencia,
tiempo de mi soledad.
TRÂNSITO
Crepúsculo que anuncia
um tempo de solidão.
Já recuperei o pranto
em minha espera elemental.
É em vão plenilúnio,
a pomba e o roseiral:
sou forasteira no âmbito
desta doçura sem par.
Não sei o que fazer com meus olhos
imigrantes. Já não sei
como vou arrepender-me
de silêncio tão fatal,
de meu batismo de sombra
diante de tanta claridade.
Nuvem, pássaro, legume,
ai, não quisera levar
às suas cálidas presenças
meu cofre de gelo e sal
Verão, clima de ausência,
tempo de minha solidão.
Página publicada em agosto de 2015.
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