VICTOR VALERA MORA
(1935-1984)
Víctor Valera Mora (Valera, 27 de septiembre de 1935 - Caracas, 29 de abril de 1984), fue un poeta venezolano perteneciente a la Generación del 58.
En 1951 se residencia junto a sus padres Antonio Isidro Valera y Elena Mora en San Juan de los Morros, donde transcurre su adolescencia. En 1956 obtiene el título de bachiller en filosofía y letras en el liceo Santa María de Caracas. Inicia estudios de Sociología en la Universidad Central de Venezuela, donde se gradúa en 1961.
Ese mismo año se realiza una modesta edición artesanal de su primer libro Canción del soldado justo, Ediciones Luxor. Comparte con los poetas Caupolicán Ovalles, Ángel Eduardo Acevedo y Luis Camilo Guevara como miembro de la «Pandilla Lautréamont».
En 1969 se residencia en Mérida, donde trabaja en la Dirección de Cultura de la Universidad de Los Andes. Dos años después, publica Amanecí de bala, con portada del pintor Carlos Contramaestre, en Impresora Regional Andina. En 1972 aparece Con un pie en el estribo en Ediciones la Draga y el Dragón. En Italia vivió varios años y escribe ahí su último libro, 70 poemas stalinistas. Entre 1974 y 1976 trabaja en la exposición de La Gran Papelería del Mundo.
En 1979 publica 70 poemas stalinistas, con portada del pintor Mateo Manaure, con el cual gana el Premio de Poesía del Consejo Nacional de la Cultura en 1980. Por cinco años (1976-1981) se desempeña como promotor cultural del Consejo Nacional de la Cultura (CONAC).
Falleció el 29 de abril de 1984 en la ciudad de Caracas.
Diez años después aparece Del ridículo arte de componer poesía, publicación póstuma que recoge la producción poética de Valera Mora entre 1979 y 1984. En 2002 el Fondo Editorial Fundarte publica sus Obras completas.
TEXTOS EN ESPAÑOL - TEXTOS EM PORTUGUÊS
VALERA MORA, Víctor. Obra poética de Víctor Valera Mora. Patrimonio cultural de Venezuela. [Caracas] Talleres de la Asamblea Nacional, 2006. 188 p. ilus. foto15x22 cm.
SUEÑO UNO
Sobre el trampolín de los sueños
el salto es ilimitado
y los cuerdos y los desacuerdos son aptos
para encender o apagar la luna
y los tuertos son príncipes encantados
y los ¡diotas ingresan a las academias
y los muy vivos se hacen místicos
y por sobre la espalda de los contrahechos la belleza
se desplaza como un tren de vidrios rotos
y no hay murallas
y los prisioneros se vuelan dé las cárceles
y los traidores los cobardes los evadidos
se curan en salud
explicando que si los tiempos fueran otros
ellos tal vez algún día pero no ahora
y los deseos son galimatías
a veces en los sueños soplan terribles tempestades
y los dioses y los frenéticos como perras paridas
se disputan el reino de la muerte
y los hambrientos arman el cielo con sus bocas
y toman por asalto el humo de los restaurantes
y los crueles existen y no existen
y el cáncer de los poderosos es un ojo que no duerme
y éste no es el país de las hadas
y las niñas sin muñecas
y los niños elevando volantines de sueños
y los que nada saben y no poseen nada
y los que sueñan por no dejar
porque aquí se pone el sol
y despierta sobre el fusil de los oprimidos
NUESTROS HERMANOS MIRAN
El cielo del amanecer está rápido
y ojos más puros que lluvia recién lavada
vigilan desde las altas piedras
nuestras son sus miradas
Nuestros sus corazones fijos en la mira del fusil
Porque estamos enamorados
los ojos del guerrillero como amor
que no se agosta
son razón para explicar
no sólo lo que vendrá sino lo que existe
Aún colmada de bienes
la vida es un perenne combate
En tiempos difíciles
quién puede precipitarse sin hacer ruído
SIEMPRE LA GUERRA
Todo está lejos de haberse hundido
el arca y los nuevos profetas
más dignos que el nivel de las aguas
vivimos
Seguiremos combatiendo
La felicidad es difícil de atrapar
quien lleve rama de olivo en el pico
no debe anunciarse ante el incendio
Es de alegrarse
del monte bajarán barbudos gavilanes
incorruptibles y será la liberación
Estamos lejos
El panfleto y las consecuencias inmediatas son míos
Yo me celebro en la poesía
como quien celebra su boda con un cuchillo
Soy el testimonio más fiel de mi país en guerra
Un día se resolverá el fuego de mi vida
La rata dorada dio un salto en el vacío
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Tradução de Antonio Miranda
SONHO UNIDO
Sobre o trampolim dos sonhos
o salto é limitado
e os cordatos e os desacordos são aptos
para acender ou apagar a lua
e os tortos são príncipes encantados
e os idiotas ingressam nas academias
e os mais vivos se tornam místicos
e por encima a espada dos contrafeitos a beleza
se desloca como um trem de vidros rotos
e não há muralhas
e os prisioneiros voam dos presídios
e os traidores os covardes os evadidos
se curam em saúde
explicando que se os tempos fossem outros
eles talvez algum mas não agora
e os desejos são balbúrdias
às vezes nos sonhos sopram terríveis tempestades
e os deuses e os frenéticos como cadelas paridas
disputam o reino da morte
e os famintos armam o céu com suas bocas
e tomam de assalto a vapor dos restaurantes
e os cruéis existem e não existem
e o câncer dos poderosos é um olho que não adormece
e este não é o país das fadas
e as meninas sem bonecas
e os meninos empinando papagaios de sonhos
e os que nada sabem e nada possuem
e os que sonham por não deixar
porque aqui o sol se põe
e despertar sobre o fuzil dos oprimidos
NOSSOS IRMÃOS OBSERVAM
No céu do amanhecer está rápido
e olhos mais puros que chuva recém caída
vigiam desde as altas pedras
nossas são suas miradas
Nossos seus corações fixos na mira do fuzil
Porque estamos enamorados
os olhos do guerrilheiro como amor
que não se esgota
são a razão para explicar
não apenas o que virá mas o que existe
Ainda saturada de bens
a vida é um combate perene
em tempos difíceis
quem pode precipitar-se sem provocar ruído?
SEMPRE A GUERRA
Tudo está longe de haver afundado
a arca e os novos profetas
mais dignos que o nível das águas
vivemos
Seguiremos combatendo
A felicidade é difícil de alcançar
quem leve ramo de oliva ao cume
não deve anunciar-se ante o incêndio
É para alegrar-se
do monte descerão barbudos gaviões
incorruptíveis e será a libertação
Estamos longe
O panfleto e as consequências imediatas são minhas
Eu me celebro na poesia
como quem celebra sua boda com um punhal
Sou a testemunha mais fiel de meu país em guerra
Um dia resolveremos o fogo de minha vida
A ratazana dourada deu salto no vazio
Página publicada em julho de 2015
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