MATEO MORRISON
Mateo Morrison Fortunato (Santo Domingo, República Dominicana, 14 de abril de 1946), es un escritor dominicano, abogado, poeta, ensayista y ex editor de suplemente literario, escogido ganador del Premio Nacional de Literatura de República Dominicana en 2010.
Estudió en el Centro Latinoamericano y del Caribe para el Desarrollo Cultural de Venezuela, titulándose en administración cultural. Fundó el Taller Literario César Vallejo a finales de los 1970 y se convirtió en 2010 en el veinteavo escritor dominicano en recibir el Premio Nacional de Literatura por el conjunto de su obra literaria, mayormente en el género de poesía. Fue director del Departamento de Cultura de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y fungió como subsecretario de cultura de República Dominicana desde 2008.
Fuente: wikipedia
TEXTOS EN ESPAÑOL - TEXTOS EM PORTUGUÊS
MORRISON, Mateo. Espasmos de la noche. 3ª. edición ampliada. Santo Domingo, República Dominicana: Editora Universitária UASD, 2008. Diseño de la cubierta: Annerick Simó. ISBN 978-9945-00-268-3
LA CÁMARA ME OBSERVA
La precisa, digital, neutral,
sofisticada, inhumana, pero no
indiferente cámara
enciende sus lentes
y me observa.
Lo sé por el silencio de su luz
porque parece adivinar
mis deseos infinitos de tomar
un paquete de avellanas,
para ir degustando
en todos los espacios del supermercado
y llegar con las manos vacías
a la puerta de salida.
La câmara de todos modos
me captará aunque de las góndolas
repletas de frutas.
Lo que quizás
no puede la câmara saber
son mis deseos
y no estoy tan seguro porque
hace mucho tempo ya se detecta
la verdade y la mentira a través
de los sonidos del corazón.
Tomaré las avellanas porque ya
de todos modos
la câmara sabe
a qué he venido.
REUNIÃO DE MÁSCARAS
A nível global
van llegando caladas
uma a uma por diversos
senderos.
Las máscaras se reúnem
para debatir los sonidos
del agua,
los latidos del centro de
la tierra
y la muerte lenta del sol.
Las máscaras reinventan
nuestras vidas em su teatral
manera de existir.
NADA MAIS
Has decidido borrar cada uno de nuestros recuerdos.
He decidido aceptar mi nueva condición de calavera
porque no hay viento que pueda recuperar
para nosotros los lugares recorridos,
las palabras pronunciadas y, sobre todo,
los prolongados silêncios
que dieron passo
al linguaje de los cuerpos.
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MORRISON, Mateo. Terreno de eros. Líquidas fromas del gozo. Santo Domingo, República Dominicana: Editora Búho, 2017. 71 p. Ilustración de portada: Julio Natera. ISBN 978-9945-08-799-4
17
Quisiera preñarlas de luz, encintarlas em navio. No es posible la
divina preñez ente nosotros, ni el arrebato que transmigra gravidez.
Como existen cavernas estreladas y lunas que se imantan. Que el
devenir disponga.
22
En mi cadáver, viverán. No saldrán a verme mientras danzan en un
convento: tumba o sacristía. Del costado izquierdo, como Evas
guerreras liberan la mitad del esclavizado paraíso.
27
En sus vocês, la montaña se descubre: sol, palma, río. Al llegar a la
plaza, hay uma exposición de paredes grafiteadas.
MORRISON, Mateo. Antología poética. 2ª. edición corrigida y aumentada. Santo Domingo, República Dominicana: Editora Búho, 2015. 527 p. 15x23 cm. ISBN 978-9945-08-289-0
LA CIUDAD NO PERDONA EL DESAFÍO DE SUS LUCES
Las mariposas
que murieron envenenadas en la ciudad
bebieron de sus aires ysus ruidos
se dejaron atraer por las luces potentes
cayeron derrumbadas en el pavimento
La ciudad no perdona el desafio de las luces.
Al amarnos en sus ojos
pienso que moriremos lentamente
no podemos contra tanta brillantez
tanto asedio y tantos ruidos
Derrotados desplacémonos
al encuentro del silencio
TRAZADO EL CONTORNO DE LA IMAGEN
Trazado el contorno de la imagen
cada sembrador se oculta em su próprio espejo
lanzando surcos al sol y al viento
sin descobrir su rostro.
De ahí salen silêncios multicolores
y la siembra se mueve
entre nostalgias.
VEA Y LEA OTROS POEMAS Y POETAS DE LA REPÚBLICA DOMINICANA
EN NUESTRA SECCIÓN DE POESÍA IBEROAMERICANA:
http://www.antoniomiranda.com.br/Iberoamerica/rep_dominicana/repub_dominicana.html
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Tradução: Antonio Miranda
A CÂMERA ME OBSERVA
A precisa, digital, neutra,
sofisticada, inumana, mas não
indiferente câmera,
acende suas lentes
e me observa.
Percebo pelo silêncio de sua luz
porque parece adivinhar
meus desejos infinitos de pegar
um pacote de avelãs,
para ir degustando
em todos os espaços do supermercado
e chegar com as mãos vazias
à porta de saída.
A câmera de todos os modos
me captará embora não colha
nenhuma avelã das gôndolas
repletas de frutas.
O que talvez
não possa a câmera saber
são meus desejos
e não estou tão seguro porque
faz já muito tempo já se detecta
a verdade e a mentira através
dos sons do coração.
Colherei as avelãs porque já
a câmera sabe
pra que eu vim.
REUNIÃO DE MÁSCARAS
A nível global
vão chegando caladas
uma a uma por diversos
caminhos.
As máscaras se reúnem
para debater os sons
da água,
o pulsar do centro da
terra
e a morte lenta do sol.
As máscaras reinventam
nossas vidas em sua teatral
maneira de existir.
NADA MAIS
Decidiste apagar cada uma das lembranças.
Decidiste aceitar minha nova condição de caveira
porque não há vento que possa recuperar
para nós os lugares percorridos,
as palavras pronunciadas e, sobretudo,
os prolongados silêncios
que deram lugar
à linguagem dos corpos.
17
Quisera engravidá-las de luz, enfitá-las em navios. Não é
possível a divina gravidez entre nós, nem o arrebato que
transmigra gravidez. Como existem cavernas estreladas e
luas que se imantam. Que o devir disponha.
22
Em meu cadáver, viverão. Não sairão a ver-me enquanto dançam no
convento: tumba ou sacristia. Do flanco esquerdo, como Evas
guerreiras liberam a metade do paraíso escravizado.
27
Em suas vozes, a montanha se revela: sol., palmeira, rio. Ao
chegar na praça, há uma exposição de paredes grafitadas.
A CIDADE NÃO PERDOA O DESAFIO DE SUAS LUZES
As borboletas
que morreram envenenadas na cidade
beberam de seus aires e seus ruídos
deixaram atrair por luzes potentes
caíram derrubadas no pavimento
A cidade não perdoa o desafio de suas luzes…
Ao amarmos em seus olhos
penso que morreremos lentamente
não podemos contra tanto brilho
tanto assédio e tantos ruídos
Derrotados desloquemo-nos
ao encontro do silêncio
TRAÇADO O CONTORNO DA IMAGEM
Traçado o contorno da imagem
cada semeador se oculta em seu próprio espelho
lançando sulcos ao sol e ao vento
sem mostrar o rosto.
Daí saem silêncios multicoloridos
e a semeadura se move
entre nostalgias.
Página publicada em fevereiro de 2017
