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DANTE MEDINA
Ha escrito libros en muy diversos géneros lirerarios: del teatro al ensayo, de la poesía al cuento, de la novela a la crónica, de la canción al espectáculo, del show a la poesía visual.
Poesía: Maneras de describir a Ana / el agua, la luna, la montaña y los puentes; Vivir. Del amor que te dí: Libreta de poemas para enamorar a laq amada.
TEXTOS EN ESPAÑOL - TEXTOS EM PORTUGUÊS
MEDINA, Dante. La Musa Fea. Guadalajara, Jalisco: Gobierno de Jalisco, Secretaría de Cultura; Univrsidad de Guadalajara, 2006. 132 p. 14x21 cm. ISBN 970-623-465-4 Col. A.M.
TÚ NO MERECES MEJOR POETA
X
La única venganza
que encontramos los poetas
contra las amadas esquivas
es escribirles veros malos.
XXXV
Como no tenía pretexto para hablarte
te preste um libro que no me devolviste.
Obtuve dos respuestas: sí y gracias.
Hice mis cálculos.
Desistí por pobreza literaria.
Para lo que yo queria de tí
era necessária, cuando menos
la biblioteca pública.
XIV
Hay otras cosas que nos impiden:
soy más de lo que mereces,
eres más de lo que merezco:
No nos merecemos.
Carta del que le tiene miedo a la sangre
Desde antes de leer
un libro donde aparece un antagónico tuyo
El Anticristo
yo ya le tenía miedo a la sangre
Y no entendía por qué
cada vez que se habla de ti
y del rito que te atribuyen
tu muerte y todo eso
se topa uno con la sangre
Cuando regreso de la iglesia
me lavo las manos incansablemente
nomás
para que mi psicoanalista se luzca
perorando que es un síntoma
de un Trastorno Cristivo Compulsivo
y luego me diga
que para hablar de religión vaya con los sacerdotes
Si de allá vengo huyendo
De ellos me escondo, Dios, porque siempre hablan de sangre
Que diste tu sangre por nosotros
Que bebemos tu sangre
Que te sangró el costado
Tus manos sangran bajo los clavos
Tu frente sangra bajo las espinas de la corona
Tus pies sangran
Uno acude a rezarte y se topa con la sangre
“La sangre de Cristo"
gritan tus pregoneros con alegría
Pero a mí me da tristeza
rasco
que me hablen de Dios con palabras de sangre
Una lavadita no le vendría mal al recuerdo de tu cuerpo
Que dejen de llorar
en todas las partes del mundo
singre tus imágenes
Esa cosa te pido, Dios mío,
para que mi corazón esté más limpio
y a mí se me quite el miedo a los santos y a ti:
aléjame de la sangre.
Carta del vestido
Señor,
mi amada quiere
que le compre un vestido.
¿Tú qué opinas?
Yo sé que se lo merece
(no es eso lo que te estoy preguntando)
Ni tampoco quiero consejo de ti
sobre asuntos de moda en los que Tú muy atrasado te quedaste
¿Para qué entonces te escribo?
¿No lo adivinas Tú que eres Dios y fabricas el futuro?
Oh, Dios, es muy simple,
y hasta pena me da molestarte
con tan poca cosa
a Ti que tienes tantas guerras desatendidas en el mundo
Lo del vestido voy y lo compro y ya
lo compro como sea y nomás que parezca bonito
y ya ni te molesto con preguntarte
Tú qué opinas de que compre un vestido
De lo que se trata es
de que no tengo amada
Y eso sí que quería preguntarte
—aunque empecé con la pregunta del vestido
que es la que viene luego, normalmente-
¿Cómo le hace uno para que lo amen?
De todos modos, te ruego me contestes
Com algún consejo sobre el vestido
por si algún día me puede servir
No dejes, Dios, que pierda las esperanzas.
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Tradução: Antonio Miranda
TU NÃO MERECES POETA MELHOR
X
A única vingança
que nós poetas encontramos
contra as amadas esquivas
é dedicar-lhes versos ruins.
XXXV
Como não tinha pretexto para falar contigo
te emprestei um livro que nunca devolveste.
Obtive duas respostas: sim e obrigada.
Fiz meus cálculos.
Desisti por pobreza literária.
Para o que pretendia de ti
seria necessário, no mínimo
a biblioteca pública.
XIV
Existem mais coisas que nos impedem:
sou mais do que mereces,
és mais do que eu mereço:
Não nos merecemos.
Carta do que tem medo de sangue
Mesmo antes de ler
um livro onde aparece um antagônico teu
O Anticristo
eu já tinha medo de sangue
E eu entendi por quê
cada vez que falam de ti
e do rito que te atribuem
tua morte e tudo o mais
a gente topa com sangue
Quando regresso da igreja
lavo as mãos incansavelmente
apenas
para que meu psicanalista se orgulhe
vaticinando que é um sintoma
de um Transtorno Cristivo Compulsivo
e depois me diga
que para falar de religião eu devo ir aos sacerdotes
Se de lá eu venho fugindo
Deles me escondo, Deus, porque sempre falam de sangue
Que deste teu sangue por nós
Que bebemos teu sangue
Que sangrou tua espalda
Tuas mãos sangram sob os pregos
Tua fronte sangra sob os espinhos da coroa
Teus pés sangram
A gente acode rezando e encontra sangue
“O sangue de Cristo”
gritam teus pregadores com alegria
Mas a mim causa tristeza
e asco
que me falem de Deus com palavras de sangue
Uma lavagenzinha não viria mal à lembrança de teu corpo
Que deixem de chorar
em todas as partes do mundo
sangre tuas imagens
Isso é te peço, Deus meu,
para que meu coração fique mais limpo
e me quite o medo dos santos e de ti:
aparta-me do sangue.
Carta do vestido
Senhor,
minha namorada quer
que eu lhe compre um vestido.
Tu, que opinas?
Eu sei que ela merece
(não é isso que eu estou querendo saber)
Tampouco quero um conselho de ti
sobre assuntos de moda sobre os quase Tu está desatualizado
Para que então te escrevo?
Não adivinhas Tu que es Deus e forjas o futuro?
Oh, Deus, é muito simples,
e me dá pena incomodar-te
por tão pouco
a Ti que tens tantas guerras desatendidas no mundo
Quanto ao vestido posso ir e compro
de qualquer maneira contanto que pareça bonito
e já não te incomodo com perguntar-te
Tu que opinas se compro o vestido?
Do que se trata mesmo
é que não tenho namorada
E é isso que queria saber de ti
— embora tenha começado com a pergunta do vestido
que foi a que surgiu primeiro, normalmente
Como é que a gente faz para que nos amem?
De qualquer forma, peço que me respondas
Com algum conselho sobre o vestido
por se acaso venha a ser útil
Não deixes, Deus, que eu perca a esperança.
Página publicada em janeiro de 2014.
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