MAX JIMÉNEZ
Poeta, novelista, pintor y escultor costarricense nacido en San José. Es el primer escritor de este país que inicia un esfuerzo consciente por incorporar los procedimientos de vanguardia a la literatura nacional como respuesta crítica a las crisis y transformaciones de su época. Figura compleja, polifacética y solitaria, miembro de una generación marcada por el desencanto de entreguerras y por la crisis de 1929, su literatura combina elementos del romanticismo, el modernismo y la experimentación vanguardista. En sus tres obras narrativas, plasma el lamento lírico-existencial ante la ausencia de plenitud y de sentido en un mundo entregado a la corrupción, el absurdo y la muerte. Así en Unos Fantoches (1929), desarrolla un triángulo amoroso; en El domador de Pulgas (1936), los vanos esfuerzos de un domador por redimir el mundo de sus pulgas amaestradas y en El Jaul (1937), narra la vida en San Luis de los Jaules. Es autor también de los libros de poesía, Quijongo (1933), Revenar (1936), Poesías (1936) y Sonaja (1936); además del libro Ensayos (1926). La característica más destacada de Max Jiménez es la sensación de disgregación y caos que provocaba la crisis y la quiebra de la sociedad tradicional y el viejo orden liberal, una respuesta ambigua y compleja que oscila entre la risa carnavalesca, la parodia lúdica, la denuncia patética o el lamento lírico. De aquí el recurso constante a la sátira, la ironía y la parodia, una estética de lo caricaturesco, lo grotesco, lo informe o deforme, que muestra un mundo dislocado o al revés, la ausencia o la perversión del sentido. Cultivó con éxito el amplio espectro de campos artísticos en que incursionó: pintura, escultura, dibujo, grabado, poesía, narrativa y ensayo, además de haber sido un viajero incansable, hecho que le dio oportunidad de estar fuertemente ligado a las vanguardias pictóricas europeas. Murió en Buenos Aires en 1947. Fuente de la biografia: http://www.epdlp.com
VIEJO CACHARRO
A Miguel Ángel Asturias
Estoy viejo por dentro, como un viejo cacharro,
expuesto a la intempérie, de liquen patinado;
un ya viejo cacharro de balcón enrejado;
y manos que usan alma, hacen joya del jarro,
porque una flor habita en el viejo cacharro.
Venimos ya de ancianos a caminhar la tierra
a tomar el progreso por lo más avanzado;
en vejez de mayores principia nuestra guerra
y somos como un niño nacido ya encorvado.
¡Yo estoy viejo por dentro, como un viejo
cacharro!...
VASILHA VELHA
Estou velho por dentro, como um vasilha velha,
exposto à intempérie, de líquen em pátina;
já uma velha vasilha de balcão gradeado;
e mãos que usam a alma, fazem joia do jarro,
porque uma flor habita a vasilha velha.
Viemos já velhos a percorrer a terra
a tomar o progresso pelo mais avançado;
em velhice de anciãos principia nossa guerra
e somos como um menino nascido já corcunda.
Eu estou velho por dentro, como uma vasilha
velha!
(Tradução: Antonio Miranda)
CALENDARIO
Calendario
margarita de la muerte;
sí, no, de nuestra suerte.
Calendario, lapidario
viejo osario
de la muerte.
¿Aún hay auras en tus hojas
para mí?
¿No habrá médio de que acojas
mis congojas?
Deshojas y deshojas,
mi corola carmesí.
Calendario:
primavera de renuevos
esperanza de días nuevos.
Te deshojas,
calendário
al osario.
Y se va por tus umbrales
la ambición sin esponsales,
en horribles bacanales...
CALENDÁRIO
Calendário
margarida da morte;
sim, não, de nossa sorte.
Calendário, lapidário
velho ossário
da morte.
Ainda existem auras em tuas folhas
para mim?
Não haverá meio para que me acolhas
em fagulhas?
Desfolhas e desfolhas,
minha corola carmesim.
Calendário:
primavera de renovos
esperança de dias novos.
Te desfolhas,
calendário
ao ossário.
E se vai por teus umbrais
ambição dos esponsais,
em terríveis bacanais...
(Tradução: Antonio Miranda)
Página publicada em outubro de 2015.
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