YULI MARLIN
(Bucaramanga, Santander.) Estudiante de Licenciatura en Español y Literatura en la Universidad Industrial de Santander. Cofundadora y actualmente presidenta del grupo literario El Rincón del Poeta. Ganadora de galardones a nivel municipal y metropolitano. Directora alterna y coordinadora de comunicaciones del Encuentro Universal de Escritores "Vuelven los Comuneros". Autora del libro de poesía Fuga de Ausencias, 2017 de UNIEDICIONES del Grupo Editorial Ibáñez.
TEXTO EN ESPAÑOL - TEXTO EM PORTUGUÊS
Extraído de
ARDILA GONZÁLEZ, Hernando. Homenaje arte como precursor de soberania y fraternidad: antologia del XII Encuentro Universal de Escritores Vuelven los Comuneros 2018. Editor Gustavo Ibañez Carreño. Bogotá: Uniediciones, 2018. 264 p. 16 x 23 cm. (Colección comuneros del mundo, ISBN 978-5527-02 -07. Ex. bibl. Antonio Miranda
Somos
suma intermitente de sonrisas
algunas miradas
que a veces no terminan.
Por lo demás
quisiera reescribirme
hablar de olvidos
entender
aceptar
amores —como si fueran muchos—.
Escribir mi propio réquiem
adolorida
con ganas de renovación valentía.
Súplica agonizante
que me libere
del peso de la existencia.
Hay varios secretos en un balcón abierto
un libro de poemas finge no necesitarlo
y entiendo que estoy nostálgica.
La noche llega con la ausencia
el café habla de los dos
un gato que nunca ha sido mi amigo se ve en mi
mirada.
La intimidad de mi pasado
es una canción que se burla entre mis dedos
recuerdo de unos ojos que no vuelven.
Sí, estoy nostálgica
me pesa mi apellido materno
la valentía es una bufanda que aún no compro.
Sueño con un hijo a largo plazo
pinto una nueva esperanza en mi espalda
un tiempo con
cementerios sin tumbas ni madres llorando.
Despierto sin vida
estéril
me imagino a mí misma
desde adentro
anciana
planeando la próxima despedida
sepultándome
y arreglándome de nuevo para la vida.
Así llego cada noche
pienso en un día sin muerte
pongo en este puñado de guerra
a la utopía por excusa.
TEXTO EM PORTUGUÊS
Tradução de Antonio Miranda
Somos
suma intermitente de sorrisos
alguns olhares
que as veces não terminam.
Além do mais
quisera reescrever-me
falar de lembranças
entender
aceitar
amores —como se fossem muitos—.
Escrever meu própio réquiem dolorida
de vontade de renovação
valentia.
Súplica agonizante
que me libere
do peso da existência.
Há vários secredos numa varanda abierta
um livro de poemas finge não necesitá-lo
e entendo que estou nostálgica.
A noite chega com a ausência
o café fala dos dois
um gato que nunca foi meu amigo se vê em meu
olhar.
A intimidade de meu passado
é uma canção que se burla entre meus dedos
lembro de uns olhos que não regressam.
Sim, estou nostálgica
pesa meu sobrenome materno
a valentia é umcachecol que ainda não compei.
Sonho com um filho a longo prazo
pinto una nueva esperança em minhas costas
um tempo com
cemitérios sem túmulos nem mâes chorando.
Acordo sem vida
estéril
imagino a mim mesma
por dentro
anciã
planejando a próxima despedida
sepultando-me
e reorganizando outra vez para a vida.
Assim chego a cada noche
pensando em um dia sem morte
ponho eneste punhado de guerra
a utopía como desculpa.
Página publicada em outubro de 2018
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