EDUARDO CARRANZA
(1913-1985)
Nació en Apiay, en los llanos orientales colombianos. En 1939, junto con otros poetas creó el movimiento literario conocido como "Piedra y Cielo", de gran importancia renovadora en la poesía colombiana. Como diplomático vivió en Chile y en España donde fue exitoso como poeta, catedrático y conferencista. Fue Director de la Biblioteca Nacional de Colombia y de las Bibliotecas Públicas de Bogotá. Murió en esta ciudad en 1985. Sobre la obra de Carranza se ha dicho: "La lírica de Carranza se caracteriza por un deslumbrante don metafórico, de origen intuitivo, a través del cual va cristalizando todas las cosas del mundo y del ser, en una transparente sinfonía. Nadie como él poseyó el secreto de las formas aéreas, translúcidas, sin perder algo así como una fuerza profunda y poderosa que brota de la tierra, del amor, de los héroes, del dolor, de la muerte, en fin, de todos los grandes temas humanos."
Nasceu em Apiay, nas planícies orientais colombianas. Em 1939, junto com outros poetas criou o movimento literário conhecido como “Pedra e Céu”, de grande importância renovadora na poesia colombiana. Como diplomata, viveu no Chile e na Espanha, onde obteve êxito como poeta, catedrático e conferencista. Foi Diretor da Biblioteca Nacional da Colômbia e das Bibliotecas Públicas de Bogotá. Morreu nessa cidade em 13 de fevereiro de 1985. Sobre a obra de Carranza foi dito: “A lírica de Carranza caracteriza-se por um deslumbrante dom metafórico, de origem intuitiva, através do qual cristaliza todas as coisas do mundo e do ser, em uma transparente sinfonia. Ninguém como ele possui o segredo das formas aéreas, translúcidas, sem perder algo assim como uma força profunda e poderosa que brota da terra, do amor, dos heróis, da dor, da morte, enfim, de todos os grandes temas humanos.”
TEXTO EN ESPAÑOL / TEXTO EM PORTUGUÊS
Tradução de Fernando Mendes Vianna
LECCIÓN DE GEOGRAFÍA
Limito al Norte con el Mar Caribe
que me baña la frente de cristal
y nácar lánguido.
AI Occidente con el Grande Océano
que alza su ramo de violenta espuma
con mano trémula.
Peces azules nadan por mi pecho.
AI Oriente me toca el Orinoco:
pasa el río por la puerta de mi alma
humedeciéndome los sueños.
Llevo a la espalda pájaros y vientos
de ala libérrima.
AI Sur el Amazonas me limita:
la dulce luna donde apoya el pie
la patria mía.
La selva está en la orilla de mi sangre:
orquídea y tigre.
Es mi Cenit el pájaro del cielo
que abre sus alas sobre mi Colombia,
quieto y volando.
Y es mi Nadir la tierra que me espera:
nuestra amante final vestida de hojas
que he mordido en las frutas y he besado
en la que amo.
Soy un terrón que canta, una bandera
tricolor desbocada sobre un potro
de la llanura.
Si me abriera las venas
la palabra Colombia saltaría
a borbotones.
Es un río quien firma este poema.
LIÇÃO DE GEOGRAFIA
Limito ao Norte com o Mar Caribe
que banha-me a fronte de cristal
e nácar lânguido.
A Ocidente com o Grande Oceano
que ergue seu ramo de violenta espuma
com mão trêmula.
Peixes azuis nadam por meu peito.
A Oriente toca-me o Orinoco:
passa o rio pela porta de minha alma
umedecendo-me os sonhos.
Levo às costas pássaros e ventos
de asa libérrima.
Ao Sul o Amazonas me limita:
a doce lua onde apóia o pé
a pátria minha.
A selva está na margem de meu sangue:
orquídea e tigre.
É meu Zênite o pássaro do céu
que abre as asas sobre minha Colômbia,
quieto e voando.
E é meu Nadir a terra que me espera:
nossa amante final vestida de folhas,
que tenho mordido nas frutas e beijado
na que eu amo.
Sou um torrão que canta, uma bandeira
tricolor desbocada sobre um potro
da planície.
Se abrisse minhas veias
a palavra Colômbia saltaria
aos borbotões.
É um rio quem firma este poema.
CARRANZA, Eduardo. Antología poética. Seleção e tradução de MMara de la Rocha. Prefáco de Ramiro Carranza. Brasília: Fundação Cultural Nossa América, 1987. 168 p. (Coleção Nossa América, 1) 13,5x20 cm. Col. Bibl. Antonio Miranda
AZUL DE Tl
Pensar en ti es azul, como ir vagando
por um bosque dorado al mediodía:
nacen jardines en el habla mia
y con mis nubes por tus sueños ando.
Nos une y nos Separa un aire blando,
una distancia de melancolía;
yo alzo los brazos de mi poesía,
azul de ti, dolido y esperando.
Es como un horizonte de violinos
o un tibio sufrimiento de jazmines
pensar en ti, de azul temperamento.
El mundo se me vuelve cristalino,
y te miro entre lámpara de trino,
azul domingo de mi pensamiento.
AZUL DE Tl
Pensar em ti é azul, como ir vagando
por um bosque dourado ao meio dia:
nascem jardins na fala minha
e com minhas nuvens, por teus sonhos, ando.
Nos une e nos separa um ar brando,
uma distância de melancolia;
eu alço os braços de minha poesia,
azul de ti, dorido e esperando.
É como um horizonte de violinos
ou um tépido sofrimento de jasmins
pensar em ti, de azul temperamento.
O mundo torna-se cristalino,
e te vejo, entre lâmpadas de trino,
azul domingo de meu pensamento.
TIEMPO DE OLVIDO
Tú que me sabes río abandonado
en el sediento cauce del olvido,
y a tu vago recuerdo tan unido
como el agua a su cielo reflejado;
Tú que me sabes tiempo deshojado
en la mano final de lo perdido
y, como un horizonte prohibido,
me circundas el sueño desvelado;
Tú que me sabes aire destinado
al vuelo de tus aves, son herido,
surtidor ruiseñor y enamorado:
Sobre este corazón atardecido
y por turbias mareas asaltado,
hazte nube volando hacia el olvido.
TEMPO DE ESQUECER
Sabes que sou como um rio abandonado
no sedento leito do esquecimento,
e a tua vã lembrança tão unido
como a água ao seu céu refletido;
Sabes que sou como o tempo desfolhado
na mão final do que foi perdido
e, como um horizonte proibido,
me envolves o sonho vigilante;
Sabes que sou como o ar, destinado
ao voo de tuas aves, som ferido
surdidor rouxinol e enamorado:
Sobre este coração crepuscular
e por turvas marés assaltado,
tornas-te nuvem voando para o esquecimento.
INTERIOR
Los ojos que se miran
a través de los ángeles domésticos
del humo de la sopa.
En la botella brilladora canta
el ruiseñor del vino.
Reluce y tintinea lo visible
en la fruta, el reloj, la porcelana.
El pan abre su mano cereal
sobre el mantel. Las flores.
En el grabado antiguo toca el arpa
una muchacha de mil ochocientos.
El cigarrillo como que te asciende
la mano. Y una puerta se entreabre
sobre la sala silenciosa y tersa:
y más allá un huerto se presiente
o tal vez el recuerdo de un jardín.
En el espejo estás ya como ausente.
Por un instante se detiene todo
y escuchamos, absortos, lo invisible
de la noche que se abre a nuestro ensueño.
Con el café llega un país lejano.
El tiempo nada puede.
Todas estas son cosas inmortales.
INTERIOR
Os olhos que se olham
através dos anjos domésticos
da fumaça da sopa.
Na garrafa cintilante canta
o rouxinol do vinho.
Reluz e tilinta o visível
na fruta, no relógio, na porcelana.
O pão abre sua mão cereal
sobre a toalha. As flores.
Na gravura antiga toca harpa
uma jovem de mil e oitocentos.
O cigarro como que te eleva
a mão. E uma porta se entreabre
sobre a sala silenciosa e límpida:
e mais além um horto se pressente
ou talvez a recordação de um jardim.
No espelho estás já como ausente.
Por um instante se detém tudo
e escutamos, absortos, o invisível
da noite que se abre a nosso sonho.
Com o café chega um país distante.
O tempo nada pode.
Todas estas são coisas imortais.
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