HÉCTOR BELLO
(1961-2013)
Héctor Eduardo Bello (El Chino Bello), nació en Caracas, Venezuela el 7 de febrero de 1961 y murió en Barquisimeto, estado Lara, Venezuela la madrugada del jueves 9 de mayo de 2013. Poeta, narrador, diseñador gráfico, editor, actor y director de teatro. Fue profesor de la Escuela de Arte Dramático en la especialidad de Teoría y Técnicas de la Actuación e Historia Social del Teatro. Se desempeñó como editor en varias editoriales, entre ellas: Ediciones Holguín, La hoja en la Calle, Actor Producciones, Sistema Nacional de Imprentas. Fue coordinador editorial de la Red Nacional de Escritores de Venezuela, capítulo Aragua. Trabajó en la Fundación Editorial El perro y la rana en el Módulo de Talleres. Directivo de la Red de Escritores de Aragua y miembro de la Red Nacional de Escritores de Venezuela. Fue actor de planta de las agrupaciones Minotauro, Marionetas de Aragua y Teatro Estable de Maracay. Actor invitado de las agrupaciones Teatro la Comedia y Taller del Método (Caracas – Valencia). Fue diseñador para la Secretaría Sectorial de Cultura de Aragua y para el Grupo Senderos Literarios de la ciudad de La Victoria. Parte de su obra se encuentra publicada en periódicos y revistas literarias del país..
En 1986 publicó en la antología: "Ciudad satélite" (muestra de la poesía en Caricuao, Editorial Ronquera).
En 2011 la Fundación Editorial El perro y la rana, Caracas le publica el libro Alteraturas. Sobre este libro el poeta Manuel Cabesa escribe: "Lo primero que llama la atención es que bajo el sonoro título de Alteraturas, nuestro recordado amigo Héctor Bello colocara la siguiente acotación: "Comedia en tres jornadas y un epílogo", cuando en realidad se trata de un poemario, y no una pieza teatral como hace suponer la engañosa oferta del subtítulo.
Y un poemario de alta factura, debo decir. En Alteraturas conviven dos elementos primigenios: poesía y representación. La poesía como vehículo para desarrollar el tema de la pasión que siente nuestro autor por el teatro. Pero la teatralidad que se refleja en estos poemas no es la que pertenece al concepto de espectáculo, sino a lo que hay detrás de él que no es otra cosa que la vida misma: la vida como drama o comedia".
En teatro infantil trabajó en "Comecuentos", de Oliva Torres, con el Grupo Minotauro, y en la "Princesa Micomicoma", con El Mundo de las Tablitas, dirigidos por Xiomara Benites y Juvenal Reyes.
Texto: Yadira Pérez . Fotografía: Tomada en algún lugar de la Av. Bolívar, muy cerca de la Escuela de Arte Dramático el día sábado 10 de noviembre de 2011 por Yadira Pérez.
TEXTOS EN ESPAÑOL - TEXTOS EM PORTUGUÊS
BELLO, Héctor. Alteraturas. Comédia en tres jornadas y un epílogo. Caracas, Venezuela: Fundación Editorial El Perro y la rana, 2011. 63 p. Tiragem: 3000 exs. ISBN 978-980-14-1121-5 Ex. bibl. Antonio Miranda
FIGURINES
Ella, bordada allí, una madeja casi,
se dehila hacia la platea.
Su ritmo es a menudo
de puntadas apretadas y firmes
pero en ocasiones mariposea hilvanes,
fantasea, como si dibujara.
Luego corrige sus gestos de figurín
y puedo imaginarla en mí
ceñida a la cintura
u holgada y elegante, como una capa.
Esta noche he ido hasta sus bocetos
para hallarme a lápiz.
(desnudo, avergonzado,
entre acotaciones al margen)
Como un personaje de comparsa
que no mereciera
ni siquiera un retazo
para salir a escena.
ACOTACIÓN
" La irrisión de viver a la manera
de una palabra entre parêntesis".
JULIO CORTAZAR
En el disfraz el tempo anaranjado
otra manera de no decir la lluvia
entretanto
un hombre ha podido suspenderte
él, a su vez, encima del insomnio,
sobre la ciudad misma,
piruetea una acotación
Al abrir el parêntesis
el disfraz nos convoca a otros colores
Yo te llevé a presenciar el espectáculo
del hombre sobre las ciudades
pude sustraerme a los autobuses
incluirte en una máquina locomotora
para hacer el amor
con otras vocês
imaginando ruedas
porque entonces jugaba a rieles y a mentiras
con mejor suerte
no podia vislumbrar al funámbulo
atropelado por esta multitud
ni templar el paréntesis
en arco
para escaparme
fue preciso
dejar de sostenerte por un tempo
lanzarme em carcajada.
CELESTINA
Esa con el atuendo de mi madre soy yo, mirándome miránola, mientras camino el peso postizo de sus tetas sobre la depresión de mi seno.
Una, remenda virgos; la outra zurce mi terrible vergüenza de ser hombre. Y em esto de llorar y reír apenas puedo imitar a la vieja alcahueta con una sonora carcajada.
Esse del camerino ya no es mi madre ni soy yo: tan sólo es maquillaje.
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Tradução: Antonio Miranda
FIGURINOS
Ela, bordada ali, uma madeixa quase,
desfia-se para a plateia.
Seu ritmo é quase sempre
de pontadas apertadas e firmes
mas em ocasiões borboleteia alinhavos,
fantasia, como se desenhasse.
Então corrige seus gestos de figurino
e posso imaginá-la em mim
ajustada à cintura
ou folgada e elegante, como uma capa.
Nesta noite fui até seus esboços
para encontrar-me a lápis.
(despido, envergonhado,
entre marcações nas margens)
Como um personagem de folia
que não mereceria
sequer um retalho
para entrar em cena.
MARCACÃO
"A irrisão de viver à maneira
de uma palavra entre parêntese".
JULIO CORTAZAR
No disfarce o tempo alaranjado
outra maneira de não dizer a chuva
entretanto
um homem conseguiu surpreender-te
ele, por sua vez, na insônia,
sobre a própria cidade,
faz cambalhota com uma marcação
Ao abrir o parêntese
o disfarce nos convoca por outras cores
eu te levei para assistir o espetáculo
do homem sobre as cidades
pude subtrair-me aos ônibus
incluir-te numa máquina locomotora
para fazer o amor
com outras vozes
imaginando rodas
porque então brincava com trilhos e mentiras
com mais sorte ainda
não conseguia vislumbrar o equilibrista
atropelado por esta multidão
nem moderar o parêntese
em arco
para escapar
foi preciso
deixar de sustentar-tempo por um tempo
lançar-me em gargalhada.
CELESTINA
Essa aí com a vestimenta de minha mão sou eu, olhando-me mirando-a, enquanto caminho o peso postiço de suas tetas sobre a depressão de meu peito
Uma, remenda virgens; a outra cerze minha terrível vergonha de ser homem. E nessa de chorar e rir apenas posso imitar a velha mexeriqueira com uma sonora gargalhada.
Nesse camarim já não é minha mãe nem sou eu: apenas a maquiagem.
Página publicada em abril de 2017