FRANCISCO VILLALBA PIMENTEL
(1944-1999)
TEXTOS EN ESPAÑOL - TEXTOS EM PORTUGUÊS
VILLALBA PIMENTEL, Francisco. Iluminaciones de barra. Prólogo de Oscar Sambrano Urdaneta. Caracas: Editorial Buchivacoa, 2008. 216 p. 14x21 cm. ISBN978-980-6455-84-9
YO EL OTRO
Renovar el vino en copa única,
descubrir a otra en tu mujer
De filo romo sacar rostro lozano,
de pijama viejo sueño joven
Paladear la existencia en su pasar,
varón de las horas macerado
Que no por transvasar su elixir,
acabar con el ser evaporado
Ahora, arribas a puerto, entero;
sumatoria de sentires plenos
Ser de seresrehecho,
ser dormido en tu hilvanar
DE LA MANCHA CLARA
Diciendo nada dice todo, tanta es su transparencia,
y así por el mendigo habla la fuente, por el ventero el vino
Tierras de Castilla diluyéndose en el horizonte,
aventándonos más y más
Ayer fablaron por boca del hidalgo y su escudero;
hoy, por la de quien repasa su ruta sobre la quimera
José Martínez Ruiz, patrono de la claridad diciente,
que dices nada y que dices todo
Cuando algún majadero se aventure a tildarte de vacuo,
tú has de ignorarlo con la prestancia del otro
* * *
GLORIA
A través de los fascículos cuadricular la historia,
dispensar entre unos pocos el mérito de la gloria
Luego, eufóricos, a celebrar en la cantina;
para, ya al final, salir y doblar la esquina
REENCUENTRO
Se acerca el día y con él me alejo,
de la luz me alejo y de la oscuridad
Pues sombra es claridad bajo el párpado,
niña acurrucada para el salto
Y al fin llega sin partir
quien final trae por empezar
Y me lleva donde no hay,
sombra de sola sombra
Frío no siento ahora ni calor,
hielo sin agua, fuego sin lumbre
Espíritu del nervio hueco,
plenitud del cero real
Cruz sobre el revuelto surco,
grano vivo de eterna muerte
Mariposa prendida al álbum,
vuelo hacia el polen primo
IMPLANTE
Carne de tu carne, sangre de tu sangre,
en ella te poseo ¡ amada suegra !
Te poseo, sí, en sus ojos retocados
y en sus labios trémulos te poseo
Y en sus pechos de mentira y de verdad,
yo te poseo ¡dulce cascara de vanidad!
* * *
Hacia dorada playa del poniente,
un caracol en la corriente
lo deja con sus versos cojos,
sin la tinta de esos ojos
Si el agua apaga el vino,
si la nube apaga el astro
Preserve señor su rastro,
hilo tinto de mirar divino
* * *
Todo ha de ser como lo planeó él
y lo predijo el adivino
Deslizándose ahora en la litera,
hacia el final del último acto
César, el dios renuente a serlo,
como no fuera de su propia mano
Mira tras el pálido velo a Roma,
pedestal de su gloria secular
Secular, hasta aquí; hombre de las edades
proyectado en el eco de sus hazañas
Con miras a engrosar la eternidad,
si sus cenizas obran el prodigio
Piezas del rompecabezas prearmado,
Casio, Bruto... aguardan con los puñales
Mientras él los aborda ansioso,
lista la lápida del favorito
Su reino, empero, no es de allá,
y César revive en sus cesares acá
Sedientos por igual de gloria humana,
ávidos de perennidad mortal
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Tradução: Antonio Miranda
DA MANCHA CLARA
Dizendo nada diz tudo, tanta é sua transparência,
e assim pelo mendigo fala a fonte, pelo taberneiro o vinho
Terras de Castilha diluindo-se no horizonte,
aventurando-nos mais e mais
Ontem falaram pela boca do fidalgo e seu escudeiro;
hoje, pela de quem repassa sua rota sobre a quimera
José Martínez Ruiz, patrono da claridade dizente,
que nada dizes e que dizes tudo
Quando algum grosseiro se aventure a designar-te vácuo,
tu has de ignorá-lo com superioridade do outro
GLORIA
Através dos fascículos quadriculares da história,
dispensar entre uns poucos o mérito da glória
Logo eufóricos, a celebrar na cantina;
para, finalmente, sair e dobrar a esquina
REENCONTRO
Aproxima-se o dia e com ele me afasto,
da luz me afasto e da escuridão
Pois sombra é claridade sob as pálpebras,
menina agachada para o salto
Afinal chega sem partir
quem final traz para começar
E me leva aonde não há,
sombra de uma sombra
Frio não sinto agora nem calor,
gelo sem água, fogo em lume
Espírito do nervo oco,
plenitude de zero real
Cruz sobre o sulco revolto,
grão vivo de eterna morte
Mariposa pregada no álbum,
voo ao pólen primitivo
IMPLANTE
Carne de tua carne, sangue de teu sangue,
nela eu te possuo, amada sogra!
Te possuo, sim, em seus olhos retocados
e em seus lábios trêmulos te possuo
Em em teus peitos de mentira e verdade,
eu te possuo, doce casca de vaidade!
* * *
Na direção da praia do poente,
um caracol na corrente
não deixa com seus versos cochos,
sem a tinta desses olhos
Se água apaga o vinho,
se a nuvem apaga o astro
Preserve senhor seu rastro,
filho tinto de olhar divino
* * *
Tudo há de ser como ele planejou
e predisse o adivinho
Deslizando-se agora na liteira,
até o final do último ato
César, o deus renuente a sê-lo,
como não fosse sua própria mão
Olha detrás do pálido véu a Roma,
pedestal de sua glória secular
Secular, até aqui; homem das idades
projetado no eco de suas façanhas
Pretendendo conquistar a eternidade,
se suas cinzas operam o prodígio
Peças de quebra-cabeças pré-armado,
Cassio, Brutus... aguardam com os punhais
Enquanto ele os aborda ansioso,
pronta a lápide do favorito
Seu reino, no entanto, não é de lá,
e César revive em selus césares aqui
Sedentos por igual glória humana,
ávidos de perenidade mortal
Página publicada em agosto de 2015.
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