ERNESTO ROMÁN OROZCO
Ernesto Román Orozco, ha publicado: Los zapatos descalzos (Edic. Revista ICAM, Venezuela 1995). Las piedras inconclusas (Edic. Mucuglifo, Venezuela 2001). La costumbre de ser sombra (El Árbol Editores, Venezuela 2003). Los hemisferios distantes del silencio (Ediciones Cada día un libro, Consejo Nacional de la Cultura, Venezuela 2005). Las casas líquidas (Ateneo de Skuke, Venezuela 2006). Las casas líquidas (Edic. La mano junto al muro, Universidad Central de Venezuela 2006). Artesa del tiempo Selección poética 2000-2008 (Monte Ávila Editores Latinoamericana, Venezuela 2008). Gestos deshabitados, Fondo Editorial Simón Rodríguez, Venezuela 2012). Edades manuscritas (UANL Colección La otra orilla, México 2012)
Extraído de
Unión LIBRE
No. 276
28 de febrero de 2016
Editorial La Draga y el Dragón
Colección El Pulpo de la distancia
Curandero y fotografías
Enrique Hernández-D’Jesús
www.unionlibre.rakumin.org/
TEXTOS EN ESPAÑOL - TEXTOS EM PORTUGUÊS
VOZ DE AVE
Un ave de barro
madura en mis cartas,
para enramar
la llaga de la lumbre:
el peso que devela
la quemadura,
cuando mi voz
retarda el trueno
HUELLAS DEL BASTÓN
El fósil de una gota de lluvia
sobre la piedra de este pez.
Sus espinas dieron luz
al monasterio. De esos años,
brillan aún los pergaminos
del monje traductor de pájaros.
Y aquel báculo de nuestra costumbre,
de caminar sin rumbo,
con un pie atascado en el cielo.
CARNE
En tu aguijón tiembla la luz
de un animal recóndito;
estupefacto.
LOS ISMOS CIEGOS
Techo de escudos
y de armas; son esos ornamentos,
el privilegio de acercar el infinito.
Una esfera de silencios mohosos,
en el perfume de la araña que teje
los cuadros frágiles de sus meditaciones.
Pero un animal sombrío desviste la voz
de su azul tren, y queda el libro,
la exaltación del viento al llevarse las hojas
y extraviar el texto que nos lee
desde la ceguera. Saldamos pues,
los signos sueltos de la historia
de una mujer de blanco que sale
de una flor, y nos asusta.
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Tradução: Antonio Miranda
VOZ DE AVE
Uma ave de barro
amadurece em minhas cartas,
para enramar
a chaga do lume:
o peso que revela
a queimadura,
quando minha voz
atrasa o trovão
VESTÍGIO DO BASTÃO
O fóssil de uma gota de chuva
sobre a pedra deste peixe.
Suas espinhas verteram luz
no mosteiro. Desses anos,
brilham ainda os pergaminhos
do monge tradutor de pássaros.
E aquele consolo de costume,
de caminhar sem rumo,
com um pé atolado no céu.
CARNE
Em teu ferrão treme a luz
de um anima recôndito;
estupefato.
OS ISMOS CEGOS
Teto de escudos
e de armas; são esses ornamentos,
o privilégio de aproximar-se do infinito.
Uma esfera de silêncios mofados.
no perfume da aranha que tece
os quadros frágeis de suas meditações.
Mas um animal sombrio desveste a voz
de seu trem azul, e resta o livro,
a exaltação do vento levando as folhas
e ao extraviar o texto que no lê
desde a cegueira. Saudamos, pois,
os signos soltos da história
de uma mulher de branco que sai
de uma flor, e nos assusta.
Página publicada em março de 2016
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