CELSO MEDINA
Nace en Cumaná, estado Sucre (Venezuela) el 23 de marzo 1954, vive actualmente en Maturín, estado Monagas (Venezuela) aromatizado con unos 61 años.
Entre sus oficios está el de poeta, ensayista y profesor.
Es licenciado en educación, mención Castellano y Literatura, en la Universidad de Oriente, tiene una maestría en Literatura Latinoamericana en la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (Núcleo de Maracay) y tiene un Doctorado en Filología Hispanoamericana en la Universidad de Salamanca.
Fue fundador de la Biblioteca de Temas y Autores del Estado Sucre.
Fue Director de Cultura del Estado Sucre. Dirigió la revista "Cálice".
Columnista del diario El Sol de Maturín y articulista de los diarios El Nacional, El Universal y Ciudad de Caracas.
Fue galardonado el 9 de octubre del 2014 con el Premio Municipal de Literatura del Municipio Libertador de la ciudad capital (Caracas), en la mención Investigación Literaria, por su libro El poeta y su epopeya ética.
Fonte da biografia: http://www.mediafire.com/…/tjuxw2klgcdu…/Media_felicidad.pdf
FESTIVAL MUNDIAL DE POESIA 4to. - ÁFRICA / AMÉRICA / ASIA / EUROPA / OCEANIA. Antologia 2007. Caracas: Casa Nacional de las Letras Andrés Bello, 2008. 355 p. 13 x 21 cm. “Los poetas en el corazón de Venezuela. Homenaje a: ANA ENRIQUETA TERÁN.
ISBN 978-8021-2163 Ex. bibl. Antonio Miranda
LA COLINA DE LOS OSARIOS
I
Estas cayenas rememoran su vestido violeta
y los jazmines perfuman mi recuerdo
Aquí. Es aquí
Cuando llegaste el horizonte era ocre
y ese osario una simple colina
erguida frente a dos promontorios habitados por leprosos
Hoy me detengo. Prefiero las oraciones olvidadas
Miro las manos. Ya no son aquellas
que tocaban las hóstias
y se aferraban a las cuerdas del campanario
para anunciar la missa
No. Estas manos han conocido nuevas tersuras
fueron más allá de las islas del rosario
Estas manos ya no son tan inocentes
Aquí me anclo para echar por la borda el agua
que me hunde
II
No logro alzarme sobre mi sombra
El sol cancelo sus azotes
Te miro en las aguas de tu florero seco
Reclinada
Y ausculto dentro de ti
Y yo, nieto inquieto
Qué oigo
Que recuerdo
Mi camisa blanca
mi catecismo
y unas ganas inmensas
de zambullirme en el mar
y los mangos
diluyendo su azúcar
en mi lengua
III
Los jazmines perfuman aún estos recuerdos
abuela semilla
abuela roble de sueños
abuela de rizos de apamates al viento
IV
Al leve roce de este mármol
mi mano es piedra
en este mar encallado
Cierro mis ojos y veo el cielo nublado
Sigo la sombra que soy
Tu alaúde es barco a orillas
del mar de Pan de Azúcar
¿Y mis manos?
Alguien robó mis manos
Alguien robô mis jazmines
Alguien me tienta para que me olvide
de la muerte
Tal vez es el diablo
que me dice:
“No reces, sigue durmiendo”.
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Tradução: ANTONIO MIRANDA
A COLINA DOS OSSÁRIOS
I
Estas malaguetas rememoram seu vestido violeta
e os jasmins perfumam minha lembrança
Aqui. É aqui
Quando chegaste o horizonte era ocre
e esse ossário uma simples colina
erguida diante dos promontórios habitados por leprosos
Hoje me detenho. Prefiro las orações esquecidas
Miro as mãos. Já não são aquelas
que tocavam as hóstias
e se aferravam às cordas del campánario
para anunciar a missa
Não. Estas mãos conheceram novas suavidades
foram além das ilhas do rosário
Estas mãos já não são tão inocentes
Aqui me ancoro para ver pela borda a água
que me afunda
II
Não consigo alçar-me sobre a minha sombra
El sol cancela seus flagelos
Te vejo nas águas de teu floreiro seco
Reclinada
E ausculto dentro de ti
E eu, neto inquieto
Que ouço
Que recordo
Mi camisa branca
meu catecismo
e uma vontade imensa
de mergulhar no mar
e as mangas
diluindo seu açúcar
em minha língua
III
Os jazmins ainda perfumam estas lembranças
avó semente
avó carvalho de sonhos
avó de risos de ipês ao vento
IV
Ao leve roce deste mármore
minha mão é pedra
neste mar encalhado
Fecho meus olhos e vejo o céu nublado
Sigo a sombra que sou
Teu alaúde é barco na beira
do mar do Pão de Açúcar
E minhas mãos?
Alguém roubou minhas mãos
Alguém roubou meus jasmins
Alguém me provoca para que me esqueça
da morte
Talvez seja o diabo
que me diz:
“No rezes, continua dormindo”.
Página publicada em março de 2020
|