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ALFREDO VILLANUEVA COLLADO
(Santurce, P.R., 1944). Ph.D. en Literatura Comparada, SUNY Binghamton, 1974.Poemarios: Las transformaciones del vidrio (1985), Grimorio (1988), Guerrilla fantasma (1989), En el Imperio de la papa frita (1989), La voz de la mujer que llevo dentro (1990) Pato salvaje (1991) Entre la inocencia y la manzana: Antología (1996); La voz de su dueño, (1999), De antiguo amor (2004), Pan errante (2005) Antologizado en Where Angels Tread at Dawn (Lippincott 1990); Papiros de Babel (UPR 1991); Cuentos Hispánicos de Estados Unidos(Arte Publico Press 1993); Low Rent (Grove Press, 1994); Hecho(s) en Nueva York: Cuentos (Latino Press, 1994), PoeSIDA (Ollantay: 1996), Noche Buena: Hispanic American Christmas Stories (Oxford, 2000), y Literatura Puertorriqueña del Siglo XX: Antologia (UPR 2004). También ha publicado en revistas cibernéticas como Palavreiros, Desde el límite, Enkidu, Misioletras, Bestiario y Letras salvajes, entre otras. Se le puede escribir a alfavil@aol.com
Descobri a poesia de Alfredo Villanueva Collado na lista de discussão de El Jabalí de meus amigos argentinos Danilo Chirón (revista El Jabalí) e Patrícia L. Boero. Foi um choque.
Deixei-me levar pela violência e esperpentismo de seus versos. Identifiquei-me inteiramente com a linguagem e o universo alegórico do poeta, com sua perversidade saudável – isso mesmo: de seu estilo oximórico e às vezes escatológico. Forte. Incontinenti, escrevi uma mensagem de aproximação e admiração.
O poeta portorriquenho ficou surpreso com o meu entusiasmo pois os versos enviesados de “Cantándolas” — o poema com o qual mais me identifiquei e que traduzi para o português —, ao que tudo indica, não eram muito populares entre os seus leitores. Talvez ele esteja enganado.
Nem todos confessam seus prazeres com as debilidades da condição humana, não declaram sua íntima dialética de dor e amor, de desespero e paixão que está na alma do melhor poeta e do melhor leitor de poesia.
A melhor poesia não é feita necessariamente de gentileza. Certamente que existe beleza nas coisas feias e repugnantes quando o artista sabe expressá-las. Repugnante mesmo é quando o poeta medíocre pensa que faz poesia bela por valer-se de supostas palavras e imagens belas... Vã poética, falsa filosofia...” Antonio Miranda (2005)
TEXTO EN ESPAÑOL y/e TEXTO EM PORTUGUÊS
CANTANDO-AS
Tradução de Antonio Miranda
Minha mãe me pedia
para ser um menino amável e cortês,
para não devolver os pescoções
nem os insultos, porque não seria próprio
de bem educados cavalheiros.
Quando alguma besta humana revelasse
sua abismal e arrogante ignorância,
que eu compadecesse
em vez de expô-la ao ridículo
porque os cristãos ovelhunos
sempre toleravam as falhas alheias,
sempre apresentavam a outra face.
Meu pai me pedia
Que esperasse os cornudos na esquina.
Se fossem mais velhos ou maiores
que partisse pra cima com um porrete
e a ferocidade de um encurralado,
causando hematomas e sangue,
me fizesse respeitar, porque este mundo
é dos mansos, não dos embolados.
Que praticasse o dom da palavra
como a espada de um arcanjo
pois São Pedro não me negaria o céu
por romper a crista de um insolente.
Ambos me deram conselhos inúteis.
Mamãe morreu com tumores violentos.
Papai morreu abusado e intacto.
Tive mais sorte: minha própria morte
foi retardada, para dar passagem
ao cataclismo de uma fúria justa.
Projetarei a raiva de minha mãe.
Não deixarei violar, como meu pai.
Farto estou de imposta hipocrisia.
Não me resta tempo para o respeito.
Canto o que percebo tal qual vejo.
Falo afinal em primeira pessoa.
A todo pulmão exibo as mediocridades
da espécie, sua infinda soberba,
seus canibais gostos autogenocidas,
seu desencaixe do daimon que serve,
seu estupro do dom da palavra,
seus punhos falidos, disfarçados
de altissonantes excrementos poéticos,
mentirosos torás, bíblias, alcorães,
democracias escravizantes,
nacionalismos ditatoriais.
Acabou-se a deferente cortesia.
O asco do amor testiculoso me impele
15.12.05
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CANTÁNDOLAS
Mi madre me decía
que fuera un chico amable y modoso,
no devolviera las pescozadas
ni los insultos, porque no era propio
de bien educados caballeros.
Cuando alguna bestia humana revelara
su abismal arrogante ignorancia,
le compadeciera
en lugar de exponerla al ridículo
porque los cristianos ovejunos
siempre toleraban las fallas ajenas,
siempre presentaban la otra mejilla.
Mi padre me decía
que esperase a los cabrones en la esquina.
Si eran mayores o más grandes
me les fuera encima con un bate
y la ferocidad de un acorralado,
les sacara moratones y sangre,
me diera a respetar, porque este mundo
es de los mansos, no los embolados.
Que utilizara el don de la palabra
como la espada de un arcángel
San Pedro no me negaría el cielo
por romperle la crisma a un insolente.
Ambos me dieron consejos inútiles.
Mami murió de tumores violentos.
Papi murió abusado e intacto.
Tuve más suerte, mi propia muerte
se ha demorado, para darle paso
al cataclismo de una furia justa.
Proyectaré la rabia de mi madre.
No me dejaré violar, como mi padre.
Harto estoy de impuesta hipocresía.
No me queda tiempo para el respeto,
Canto lo que percibo como lo veo.
Hablo por fin en primera persona.
A pulmón exhibo las mediocridades
de la especie, su infinita soberbia,
su caníbales gustos autogenocidas,
su desenchufe del daimon que sirve,
su estupro del don de la palabra,
sus puñetas fallidas, disfrazadas
de altisonantes excrementos poéticos,
mentirosos torahs, biblias, coranes,
democracias esclavizantes,
nacionalismos dictatoriales.
Se acabó la deferente cortesía.
El asco del amor encojonado me impele
15.12.05
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TELOS
No existe tal cosa como la
eternidad. Lo que llamamos
eterno, sólo una sarta de tiempos
momentáneos, una cadena de
aguijonazos, nombres, fragancias
que la memoria recoge en sus fragmentos
y guarda, atesorando, un poniente, un bolero,
tantas manos sabihondas de llaves
que abrieran las compuertas
de innumerables cuerpos.
La engañifa de la divinidad perversa,
afanosa de orgasmos, a nuestra semejanza,
requiere el sacrificio de partes vitales,
la soledad llena de fantasmas.
Putrefacción, muertes, violaciones,
alimentan su insaciable apetito.
Lo incrementan porque sólo puede hacer suyo
lo que sus miembros embriagados perciben
a través del montaje de una ruina aparente,
el cambio incesante de la puesta en escena.
Y mientras tanto, cuánto desencantan
dragones, muchachas, morriñas, llantenes.
fantasías ingenuas que no confrontan
la inexorable oxidación de fibras.
Al que sabe lo que le espera a la vuelta
de cualquier día, ya no le queda
tiempo para pueriles exquisiteces.
Nuevas tareas le ocupan los sentidos.
Deja atrás un planeta. Lleva consigo instantes.
Tiembla mientras se entrega de nuevo al misterio. |
TELOS
Não existe tal coisa como a
eternidade. O que chamamos
eterno, só uma enfiada de tempos
momentâneos, una cadeia de
agulhadas, nomes, fragrâncias
que a memória recolhe em seus fragmentos
e guarda, entesourando, um poente, um bolero,
tantas mãos sabichonas de chaves
que abriram as comportas
de inumeráveis corpos.
A enganação da divindade perversa,
afanosa de orgasmos, a nossa semelhança,
requer o sacrifício de partes vitais,
a solidão plena de fantasmas.
Putrefação, mortes, violações,
alimentam teu apetite insaciável.
Incrementam porque só pode tornar seu
o que seus membros embriagados percebem
através da montagem de um ruína aparente,
na troca incessante de uma encenação teatral.
E entretanto, quanto desencantam
dragões, moças, melancolias, gemidos
fantasias ingênuas que não confrontam
a inexorável oxidação de fibras.
Quem sabe o que o aguarda na virada
de qualquer dia, já não lhe resta
tempo para esquisitices pueris.
Novas tarefas ocupam seus sentidos.
Deixa para trás um planeta. Chega consigo instantes.
Treme enquanto se entrega outra vez ao mistério. |
ÁNGEL EN EL CIRCO*
(de esta obra seleccionamos y presentamos el Canto)
-VII-
Los ángeles aterran. Recién salidos
de los muslos entrelazados de los ríos
y los huevos celestes, húmedos
en cada coyuntura, redescubren
su misión de tentadora calentura.
En cambio, cada primavera,
antiguas mentiras recorren las arterias
de la carne antigua:
no hay sexo dulce para la triste criatura humana,
sino promesas que olvidar.
Se malgasta la vida en los que viven,
les ahoga un raudal de jeroglíficos
y hemorragian,
orinándose en vetas
rojas con pedazos de poetas.
Aterrado
de la visita del informe alado,
uno piensa que es cosa de aprender
o enseñar:
si uno fuera el único discípulo
del rostro que uno lleva,
o el maestro socrático
del rostro de algún otro.
De dónde vienes. Dónde te encuentras. Para dónde vas.
Pero a las preguntas sin respuestas
hay que oponer la profesión de fe,
para que esa fe sea la fruta
de la flor ligera que se ensancha:
a los ríos de sangre no se les restaña
con sangre. Un mendigo es más importante
que toda moda de derecha o de izquierda.
El rebelde se forja rebelándose
contra las mal llamadas r/evoluciones
y el canto general
es una voz como otra voz y cualquier voz
con el derecho de sonar en todo espacio.
De lo que queda . . . ¡león alado
por las llanuras inaccesibles
a los masticadores de palabras,
rugiéndole a la estrella, con un dolor, un asco,
mucha piedad, y un buen oído
para lo que se arrastra!
¿A quién le toca
bregar con el lector, el hipócrita hermano,
y la cesárea del entendimiento?
Cada ángel aterra. Al caer sobre tierra,
lo estremecen orgasmos inocentes,
se recubre de sudor de manzana,
y se va a rezar o putear, o a putear
y rezar, o a putear y a putear,
chupándose un dedito medio crudo,
masticando un chicle de enciclopedia,
hasta que un humano le moja las plumas
al bailarle pegadito de las alas.
*Poemas incluidos en Entre la inocencia y la manzana (San Juan de Puerto Rico: Editorial de la Universidad de Puerto Rico, 1996).
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ANJO no CIRCO*
(desta obra seleccionamos e apresentamos o Canto)
-VII-
Os anjos aterram. Recém saídos
das coxas entrelaçadas dos rios
e os ovos celestes, úmidos
em cada conjuntura, redescobrem
sua missão de tentadora calentura.
Em compensação, a cada primavera,
antigas mentiras recorrem as artérias
da carne antiga:
não há sexo doce para a triste criatura humana,
somente promessas para esquecer.
Se malgasta a v ida nos que vivem,
afoga-as um caudal de hieróglifos
em hemorragia,
urinando-se em veias
vermelhas com fragmentos de poetas.
Aterrorizado
com a visita do informe alado,
a gente pensa que é coisa de aprender
ou ensinar:
se a gente fosse o único discípulo
do rosto que se leva,
ou o mestre socrático
do rosto de algum outro.
De onde vens? Onde te encontras? Por onde vais?
Mas às perguntas sem despostas
há que opor-se a profissão de fé,
para que esta fé seja a fruta
da flor ligeira que se amplia:
aos rios de sangue não se estanca
com sangue. Um mendigo é mais importante
que toda moda de direita ou de esquerda.
O rebelde se forja rebelando-se
contra as mal chamadas r/evoluções
e o canto geral
é a voz como outra voz e qualquer voz
com direito a ecoar em todo o espaço.
Do que resta... leão alada
pelas planícies inacessíveis
aos mastigadores de palavras,
rugindo para a estrela, com uma dor, um asco,
muita piedade, e um bom ouvido
para o que se arrasta!
A quem corresponde
brigar com o lector, o hipócrita irmão,
e a cesárea do entendimento?
Cada anjo aterra. Ao cair sobre a terra,
tremem de orgasmos inocentes,
recoberto do suor de maçã,
e vai rezar ou putear, ou a putear
e rezar, ou a putear e putear,
chupando-se um dedinho meio cru,
mastigando um chiclete de enciclopédia,
até que um humano molha suas penas
ao dançar pegadinho de suas asas.
*Poemas incluídos em Entre la inocencia y la manzana (San Juan de Puerto Rico: Editorial de la Universidad de Puerto Rico, 1996).
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(VOCES)
(De: Poemas Integrados)
Una voz cruzando distancias
por caminos de viento escarlata
perfila contornos de montañas
y conduce a una estancia.
Una voz desde las distancias
invita a la fiesta de cada minuto,
nunca termina de acabar tareas
y se extiende infinita.
Una voz que abarca distancias
lleva al museo de retratos,
de los momentos capturados
en parpadeos azorados.
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(VOZES)
(De: Poemas Integrados)
Uma voz cruzando distâncias
por caminhos de vento escarlate
perfila contornos de montanhas
e conduz a uma estância.
Uma voz desde as distâncias
convida à festa de cada minuto,
nunca termina de acabar tarefas
e se estende infinita.
Uma voz que abarca distâncias
leva ao museu de retratos,
dos momentos capturados
em pestanejos irritados.
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(LA CALLE)
(De: Postales de Nueva Cork)
Toda la historia del mundo
comienza en una calle.
Hay evidencia rigurosa
de que la calle es eterna.
Basta ver con las orejas,
escuchar con las narices,
y con los ojos, tocar
la calle de un lado a otro.
Uno podrá haber estado
en muchas grandes ciudades
con enormes avenidas
y altivos monumentos
pero uno siempre se encuentra
con su calle y con su gente.
La calle, en una maleta
va con uno a cualquier parte.
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(A RUA)
(De: Postales de Nueva Cork)
Toda a historia do mundo
principia numa rua.
Há rigorosa evidência
de que a rua é eterna.
Basta ver com as orelhas,
escutar com as narinas,
e com os olhos, traçar
a rua de um lado a outro.
A gente pode ter ido
a muitas grandes cidades
com enormes avenidas
e altivos monumentos
mas sempre se depara
com sua rua e sua gente.
A rua, numa maleta
vai com a gente a toda parte.
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