ROQUE VALLEJOS
Nació en 1943 en Asunción. Su ficha personal dice: Periodista, poeta, crítico, médico.
Forma parte de la llamada "promoción de 1960", con Francisco Pérez Mariecevich, Esteban Cabañas y Miguel A. Fernández: "Poetas urgidos por una misma ansiedad y un mensaje unívoco: el de un mundo ent rizas que cada uno de ellos trata de salvar reconstruyéndolo con la palabra, enfrentándolo con un temple distinto, en un ámbito diverso de la imaginación o de la sensibilidad, pero con una equivalente desesperada sinceridad".
Aparte de sus ensayos, ha publicado Pulso de sombra, Los arcángeles ebrios y Poemas del Apocalipsis. En ellos Josefina Plá ve que "Vallejos ha creado una poesía desnuda penetrada por un lívido rasgo al sesgo; como en los cuadros de los "tenebrosi" es notable la ausencia en ella de palabras que aludan a la claridad, a la luz, a la compañía de las cosas; su claridad es siempre una claridad sin memoria, opaco, renunciante. Poesía engañosamente desnuda, con una inabarcable desnudez abismal. Asida como el trago de muerte a que alude en uno de sus poemas".
Fuente: http://members.fortunecity.com/mundopoesia2/autores/roque_vallejos.htm
TEXTOS EN ESPAÑOL / TEXTOS EM PORTUGUÊS
HAY VECES...
para Augusto Roa Bastos
Hay veces en que nadie
recuerda
que existimos;
que La vida se encoge
y nos aprieta,
y que es difícil despertar
cada mañana
la sangre en nuestras venas.
Días de conservar
el esqueleto, doblados hacia adentro,
y de llorar a os curas
sobre estos mismos huesos,
de usar la propia piel
como mortaja, y decirle
a la vida que no estamos
y que vuelva otro día.
POEMA
A Francisco y Ricardo Mardones
En polvo que rodando
se hará hombre
para iniciar de nuevo
su jornada
sin nacer otra vez,
rumbo a otro cielo,
desde su alta mar de ceniza.
Extraña fundación, parto vacío, resucitado
sueño de la arcilla. Dios
consumido por el triste oficio
y ser la llama de su propia hoguera.
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Versões de Antonio Miranda
HÁ VEZES...
Para Augusto Roa Bastos
Há vezes em que ninguém
se lembra
que existimos;
que a vida se encolhe
e nos aperta,
e que é difícil despertar
toda manhã
o sangue em nossas veias.
Dias de conservar
o esqueleto, virados para dentro,
e chorar no escuro
sobre estes mesmos ossos,
de usar a própria pele
como mortalha, e dizer-lhe
à vida que não estamos
e que regresse outro dia.
POEMA
A Francisco y Ricardo Mardones
No pó que virando
se fará homem
para recomeçar
sua jornada
sem nascer outra vez,
na direção do céu,
desde sua mais alta cinza.
Estranha fundação, parto vazio, ressuscitado
sonho do barro. Deus
consumido pelo triste ofício
e ser a chama de sua própria fogueira.
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