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MIRTA AGUIRRE
Mirta Aguirre Carreras (La Habana, 18 de octubre de 1912 - 8 de agosto de 1980) fue una escritora, periodista y militante política cubana.
Combina sus estudios con su militancia política desde los primeros años. Graduada en Derecho, trabaja como profesora universitaria en Cuba. Milita en distintas agrupaciones comunistas y feministas, debiendo exiliarse a México, unos años, por su postura opositora frente al gobierno de Gerardo Machado.
Ya de vuelta en el país, colabora y dirige numerosas publicaciones, llegando a firmar varios miles de artículos, algunos de ellos premiados.
Participa, también, en distintas agrupaciones de tendencias marxistas y feministas. Así pues, milita en el Partido Comunista de Cuba, en el Frente Nacional Antifacista, o la Sociedad Amigos de la URSS. Asiste a distintos congresos en el extranjero, como la Conferencia Cultural y Científica por la Paz Mundial (Nueva York, 1949) o el Congreso Mundial de Partidarios por la Paz (París, 1949).
Mirta Aguirre fue profesora en la Universidad de la Habana. Amén de su amplia obra ensayística en la que sobresale Del encausto a la sangre: Sor Juana Inés de la Cruz, escribió poesías para niños, algunas de las cuales han sido musicalizadas.
Biografía: es.wikipedia.org
TEXTOS EN ESPAÑOL - TEXTOS EM PORTUGUÊS
CON UN MISMO FUEGO. POESÍA CUBANA. Selección de Aitana Alberti. Torremollinos, Málaga, España: Litoral Ediciones UNESCO, 1997. (Colección UNESCO –OBRAS REPRESENTATIVAS) 223 p. ilus. col. Poretada:? Lorenzo Saval – Incluye un folleto con la poesía de Francisco Fortuny: El agua en la boca (Litoral /Suplemento 4) ISBN 92-3-30457-7 Edição especial da revista LITORAL Revista de la Poesía, el Arte y el Pensamiento. ISSN 0212-4378 Ex. bibl. Antonio Miranda
Este camino yo he de hacerlo a solas
A ciegas, como un niño...
Como un niño, a pasos inseguros,
yendo a poner la frente sobre el filo
de todos los cuchillos...
Que nadie me dé luz. Que nadie tienda
su gesto en mi socorro.
Dejadme que tropiece, que me hiera,
¡dejadme que me caiga!´
Nadie podrá sostenerme los pasos
si mi esfuerzo
no puede sostenerme.
Este camino yo he de hacerlo a solas.
Que me ayude yo misma,
que me alce yo y sostenga,
que me empuje mi fuerza y sólo ella.
No habría nadie capaz de levantarme
más alto que mi pecho,
sin que la sangre huyera por mis poros.
Pequeña o no, dejadme ir a la altura,
a que puedan trepar mis pies sin guia.
Dejad que pruebe mis músculos, mis nervios,
la anchura de mi espíritu.
¡Dejadme ser a mí! Aunque no sea
cuanto hubiera podido.
Y aunque en barro se graben, ¡que sean mías
las huellas de mis dedos!
Jirón de sol o sombra diluída.
¡Dejadme ser yo misma
y buscarme yo a solas.
Canción de la vida plena
Que la vida tenga
siete dimensiones.
Que sea jinete rojo de la alegría
y llanto de niño.
Que sea larga como la pena de un negro,
tan larga como una prisión de fantasmas.
Que fatigue los rostros de todas las estrellas
y bailen sus pies libres
sobre todos los vientos.
Que comenzando en bronce acabe en luna,
en luna vigorosa como un fruto
—¡la que reluce sobre
las voces sin cansancio!—
y no en la dessangrada por los viejos poemas.
¡Que sea marinera en barco sin anclas!
Que sus plantas cubran
todo el firmamento
y más que humana sea siendo humana.
Que haga sol de su sombra
y de su nieve lumbre...
Las perlas son apenas
carbonato de cálcio
y el barro, el barro es, ¡pero hay quien puede
hacer que suene a plata!
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Tradução: Antonio Miranda
Este caminho eu hei de percorrer sozinha
Às cegas, como uma criança...
Como uma criança, a passos inseguros,
indo colocar a fronte sobre a lâmina
de todas as facas.....
Que ninguém me lance a luz. Que ninguém estenda
seu gesto em meu socorro.
Deixai-me que tropece, que me fira,
deixa que eu caia!
Ninguém poderá segurar os passos
sem o meu esforço
não pode sustentar-me.
Este caminho eu hei de trilhá-lo sozinha.
Que eu mesma me ajude,
que eu me levante e me sustente,
que me empurre minha força e apenas ela.
Ninguém seria capaz de levantar-me
mais alto que o meu peito,
sem que o sangre fuja por meus poros.
Pequena ou não, deixai-me chegar à altura,
a que meus pés possam trepar sem um guia.
Deixai que eu prove meus músculos, meus nervos,
a largura de meu espírito.
Deixais-me ser eu mesma. Embora não seja
quanto houvesse podido.
E mesmo que em barro gravem, que sejan minhas
as pegadas de meus dedos!
Sol mínimo ou sombra diluída.
Deixai-me ser eu mesma
e buscar- me sozinha.
Canção da vida plena
Que a vida tenha
sete dimensões.
Que seja peão rubro da alegria
e pranto de criança.
Que seja longa como a pena de um negro,
tão longa como uma prisãos de fantasmas.
Que fatigue os rostos de todas as estrelas
e bailem seus pés livres
sobre todos os ventos.
Que começando em bronze acabe em lua,
em lua vigorosa como um fruto
—a que brilha sobre
as vozes sem cansaço!—
e não na ensanguentada pelos velhos poemas.
Que seja marinheira em navio sem âncoras!
Que suas plantas cubram
todo o firmamento
e mais que humana continue sendo humana.
Que faça sol de sua sombra
e de sua neve lume...
As pérolas são apenas
carbonato de cálcio
e o barro, o barro é, mas há quem pode
fazer que vibre como prata!
Página publicada em fevereiro de 2019
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