LEÓN DE GREIFF
(1895-1976)
Poeta colombiano nacido en Medellín, Colombia.
Su literatura se inició dentro del modernismo, pero luego adopta postulados estéticas inspirados en el surrealismo francés y con el creacionismo de Vicente Huidobro.
Libros: Tergiversaciones, Libro de signos, Variaciones alrededor de nada , Prosa de Gaspar, Fárrago.
TEXTOS EM ESPAÑOL / TEXTOS EM PORTUGUÊS
RELATO DE SERGIO STEPANSKY
Juego mi vida!
Bien poco valía!
La llevo perdida
sin remedio!
Erik Fjordsson
Juego mi vida, cambio mi vida,
de todos modos
la llevo perdida ...
Y la juego o la cambio por el más infantil espejismo,
la dono en usufructo, o la regalo ...
La juego contra uno o contra todos,
la juego contra el cera o contra el infinito,
la juego en una alcoba, en el ágora, en un garito,
en una encrucijada, en una barricada, en un motín;
la juego definitivamente, desde el principio hasta el fin,
a todo lo ancho y a todo lo hondo
—en la periferia, en el medio,
y en el sub-fondo ... —
Juego mi vida, cambio mi vida,
la llevo perdida
sin remedio.
Y la juego,· o la cambio por el más infantil espejismo,
la dono en usufructo, o la regalo ... :
o la trueco por una sonrisa y cuatro besos:
todo, todo me da lo mismo:
lo eximio y lo rüin, 10 trivial, lo perfecto, lo malo ...
Todo, todo me da lo mismo:
todo me cabe en el diminuto, hórrido abismo
donde se anudan serpentinas mis sesos.
Cambio mi vida por lámparas viejas
o por las dados con las que se jugó la túnica inconsútil:
—por lo más anodino, por lo más obvio, por lo más fútil:
por los colgajos que se guinda en las orejas
la simiesca mulata,
la terracota rubia;
la pálida morena, la amarilla oriental, o la hiperbórea rubia:
cambio mi vida por una anilla de hojalata
- por Ia espada de Sigmundo, o por e! mundo
que tenía en los dedos Carlomagno: -para echar a rodar la bola ...
Cambio mi vida por la cándida aureola del idiota o del santo;
la cambio por el collar
que le pintaron al gordo Capeta;
o por la ducha rígida que llovió en la nuca
a Carlos de Inglaterra;
la cambio por un romance, la cambio por un soneto;
por once gatos de Angora,
por una copla, por una saeta, por un cantar;
por una baraja incompleta;
por una faca, por una pipa, por una sambuca ...
o por esa muñeca que llora
como cualquier poeta.
Cambio mi vida -al fiado- por una fábrica de crepúsculos
(con arreboles);
por un gorila de Borneo;
por dos panteras de Sumatra;
por las perlas que se bebió la cetrina Cleopatra—
o por su naricilla que está en algún Museo;
cambio mi vida por lámparas viejas,
o por la escala de Jacob, o por su plato de lentejas ...
¡o por dos huequecillos minúsculos
-en las sienes- por donde se me fugue, en grises podres,
la hartura, todo el fastidio, todo el horror que almaceno [en mis odres ... !
Juego mi vida, cambio mi vida.
De todos modos
Ia llevo perdida ...
(De Variaciones alrededor de nada, 1936)
TEXTOS EM PORTUGUÊS
Versão de Antonio Miranda
RELATO DE SÉRGIO STEPANSKY
!Juego mi vida!
¡Bien poco valía!
La llevo perdida
sin remedio!
Eric Fjordsson
Jogo com minha vida, troco minha vida,
de qualquer maneira,
eu a tenho perdida.
E a jogo ou troco pelo mais infantil espelhismo,
Dôo-a em usufruto, ou a presenteio...
Jogo-a contra um e contra todos,
jogo-a contra o zero ou contra o infinito.
Jogo-a numa alcova, na ágora, sem garito,
numa encruzilhada, numa barricada, num motim;
jogo-a definitivamente, do princípio ao fim,
pra todo lado e até no fundo
—na periferia, no meio,
e até no submundo...—
Jogo minha vida, troco minha vida,
eu a tenho perdida
sem remédio.
E a jogo, ou troco-a pelo mais infantil espelhismo,
Dôo-a em usufruto, ou a presenteio:
ou troco-a por um sorriso e quatro beijos:
tudo, tudo resulta igual:
o exímio e o ruim, o trivial, o perfeito, o mal...
tudo resulta no mesmo:
tudo cabe no diminuto, horrendo abismo
onde se reúnem serpentinos meus miolos.
Troco minha vida por lâmpadas velhas
ou pelos dados com que se jogou a túnica inconsútil:
—pelo mais anódino, pelo mais óbvio, pelo mais fútil:
pelas argolas que dependuram nas orelhas
a simiesca mulata,
a terracota dourada;
a pálida morena, a oriental amarela, ou a hiperbórea loura:
troco minha vida por anel de lata
ou pela espada de Sigmundo,
ou pelo mundo
que tinha nos dedos Carlos Magno—para a boca rolar...
Troco minha vida pela cândida auréola
do idiota ou do santo;
troco-a pelo colar
com que pintaram o gordo Capeto;
ou pela ducha rígida que choveu na nuca
de Carlos da Inglaterra;
troco-a por um romance, por um soneto;
por onze gatos de Angorá,
por uma copla, por uma flecha;
por um cantar;
por um baralho incompleto;
por uma faca, por um cachimbo, por uma sambuca...
ou por esta boneca que chora
como qualquer poeta.
Troco minha vida —e fiado— por uma fábrica de crepúsculos
(com arrebóis);
por um gorila de Bornéu;
por duas panteras de Sumatra;
pela pérolas que a cetrina Cleópatra engoliu—
ou pelo narizinho que está em algum museu;
troco minha vida por lâmpadas velhas
ou pela escala de Jacó, ou por seu prato de lentilhas...
ou por dois furinhos minúsculos
—na fronte— por onde eu escape, em cinzas podres,
a fartura, todo o fastio, todo o horror que armazeno em meus odres...!
Jogo minha vida, troco minha vida.
De qualquer maneira,
eu a tenho perdida...
(De Variaciones alrededor de nada, 1936)
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