ROLANDO CÁRDENAS
(1933-1990)
Rolando Cárdenas Vera nació en Punta Arenas, extremo sur de Chile, poeta de la Generación del 50.
Libros: Tránsito breve (1961), En el invierno de la provincia (1963), Personajes de mi ciudad (1964), Poemas migratorios (1974), Qué tras esos muros (1986),
Vastos Imperios (1994) (Libro póstumo).
TEXTOS EN ESPAÑOL / TEXTOS EM PORTUGUÊS
OVEREND
Nada detrás de este silencio de roca,
nada detrás de estas raíces
que piden eternidad a una tierra que no existe.
Y no descansa el aire doloroso y perfecto,
ni la soledad detenida como un río del cielo,
distante y profunda
como el parpadeo de los planetas más lejanos.
Nada sino pensar
en la ruta extraviada de los barcos
buscando ciudades en la bruma,
que a veces aparecían debajo de la lluvia,
o cuando el sol abría el horizonte
brillaban como la nieve en las tres agujas del Paine.
También el mar sin tregua está presente
con algo de humano y taciturno dentro de su bahía,
rodeado de una corteza petrificada y roja,
inexpresiva y poderosa
como el sueño de las que se ahogaron
lejos de la desvelada luz de los faros.
Y sin embargo, se suaviza su materia oleosa
cuando copia el vuelo de cenicientos petreles.
AI final
más allá de lo que no ha transcurrido
y no conocemos, porque todo es más antiguo que el silencio,
la noche y las aves oscuras se parecen,
existen ciudades de oro donde nunca se muere,
existe el agua y rocas manchadas por el musgo,
y una lluvia que vuelve a construir lejanías
en busca de buena tierra
para que asomen los bosques.
TEXTOS EM PORTUGUÊS
OVEREND
Nada detrás deste silêncio de rocha,
nada detrás destas raízes
que pedem eternidade a uma terra que não existe.
E não descansa o ar dolorido e perfeito,
nem a solidão detida como um rio do céu,
distante e profunda
como o pestanejar dos planetas mais distantes.
Nada além de pensar
na rota extraviada dos navios
buscando cidades na bruma,
que as luzes apareciam debaixo de chuva,
ou quando o sol abria o horizonte
brilhavam com a neve nas três agulhas do Paine.
Também o mar sem trégua está presente
como algo de humano e taciturno dentro de sua baía,
rodeado por uma casca petrificada e vermelha,
inexpressiva e poderosa
como o sonho dos que se afogaram
longe da desvendada luz dos faróis.
E no entanto desvanece sua matéria oleosa
quando imita o vôo dos cinzentos petrelos.
Ao fim
além do que não aconteceu
e não conhecemos, porque tudo é mais antigo que o silêncio
a noite e as aves escuras se assemelham,
existem cidades de ouro onde nunca se morre,
existe a água que volta a construir distâncias
em busca de terra boa
para que reavivem os bosques.
|