POESIA PERUANA  
                      Coordinación: Jorge Alania  - jorgealania@terra.com.pe  
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                      Fuente: http://www.librosperuanos.com 
                        
                      CARLOS LÓPEZ DE GREGORI 
                        
                        
                      Nació en Lima en 1952. Recebió premios y reconomientos  por su labor literário.  
                        
                      Obra poética: Un  buen día (1978); Las conversaciones (1983), Una casa en la sombra (1986), Cielo forzado (1988), El amor  rudimentario (1990), Lejos de todas partes (1994), y Retratos de un caído  resplandor (2002). 
                      TEXTOS EM ESPAÑOL  /     TEXTOS EM PORTUGUÊS  
                        
                      EL OFICIO EL DESEO EL MALEFICIO 
                        
                      Tener derecho a  escribir 
                      uno de si 
                      o para si. 
                      Creo que no lo  tengo. 
                        
                      Derecho a esconder 
                      y quede aquí escondido  lo importante 
                      a fabular. 
                        
                      Un escarabajo me  enseñó a escribir sencillo este poema 
                      dejar atrás la  oscuridad 
                      vencer 
                      porque no se  devuelve la palabra. 
                        
                      Un escarabajo  rebela revela rebela 
                      nada busca decir 
                      reúne la pasión con  el estiércol. 
                        
                      Hoy domingo 
                      en que al fin me  encuentras remendando 
                      aprendo lo esencial 
                      profano 
                        
                      la palabra justa es  barro fresco.  
                        
                        
                      LOS TRES VENENOS 
                        
                      Eres tres, Fulgor, 
                      en esta noche 
                      de espejos. 
                        
                      Tres venenos 
                      o tres flores 
                      con las bocas  encendidas 
                      o tres afilados  corazones 
                               traídos por el viento, 
                               por el sueño, 
                               por el mar. 
                        
                      Eres tres  puertas abiertas 
                      a la sombra de  una habitación 
                               que me aguarda desde siempre. 
                      En ella hay  peldaños  
                      que nadie sabe  si descienden o suben, 
                      hay tres camas,  tres sábanas volantes, 
                      tres bujías, 
                      tres bosques de  carne o de cristal 
                               y tres pulsos 
                                        y tres tormentas 
                                        y tres ecos 
                                        y tres muertes. 
                        
                      Eres tres  fieras de lumbre. 
                        
                      Tres hilos que  para verte y no verte 
                      han cosido  
                      y descosido 
                      mis párpados. 
                        
                      Tres lenguas 
                      abrasadas en mi  lengua 
                      balbuceando en  un idioma imposible 
                               mis historias y secretos: 
                      ésos que cobran  vida 
                               y son amores tristes 
                               que caminan 
                               por los parques vacíos 
                      buscando un  solo árbol entre todos los árboles: 
                               porque allí grabarán en su corteza viva 
                                        tres veces 
                      aunque duela 
                               y duela 
                               y duela 
                        
                      tu nombre  definitivo. 
                        
                      
                        
                      TEXTOS EM PORTUGUÊS 
                      Tradução de Antonio Miranda 
                        
                        
                      O OFÍCIO O DESEJO O MALEFÍCIO 
                        
                      Ter o direito de  escrever 
                      sobre si 
                      ou para si. 
                      Creio que não o  tenho. 
                        
                      Direito de esconder 
                      e fique aqui  escondido o importante 
                       a fabular. 
                        
                      Um escaravelho me  ensinou a escrever simples este poema 
                      deixar para trás a  escuridão 
                      vencer 
                      porque não se  devolve a palavra. 
                        
                      Um escaravelho  rebela revela rebela 
                      nada pretende dizer 
                      reúne a paixão com  o estrume. 
                        
                      Hoje domingo 
                      quando finalmente  me encontro remendando 
                      aprendo a essência 
                      profano  
                      a palavra justo é  barro fresco. 
                        
                        
                      OS TRÊS VENENOS 
                        
                      És três, Fulgor, 
                      nesta noite 
                      de espelhos. 
                        
                      Três venenos 
                      ou três flores 
                      com as bocas acesas 
                      ou três afiados  corações  
                               trazidos pelo vento, 
                               pelo sonho, 
                               pelo mar. 
                        
                      És três portas abertas 
                      à sombra de uma  alcova 
                               que me aguarda desde sempre. 
                      Nela existem  degraus  
                      que ninguém sabe se  descem ou sobem, 
                      tem três camas,  três lençóis volantes 
                      três velas, 
                      três bosques de  carne ou de cristal 
                               e três pulsos 
                                        e três  tormentas 
                                        e três ecos 
                                        e três mortes. 
                        
                      És três feras de  lume. 
                        
                      Três fios que para  ver-te não ver-te 
                      costuraram 
                      e descosturaram  
                      minhas pestanas.  
                        
                      Três línguas 
                      abrasadas em minha  língua 
                      balbuceando em um  idioma impossível 
                               minhas histórias e segredos: 
                      esses que cobram  vida 
                               e são amores tristes 
                               que caminham 
                               pelos parques vazios 
                      buscando uma única  árvore entre todas as árvores, 
                               porque ali gravarão na sua casca viva 
                                        três vezes 
                      mesmo que doa 
                               e doa 
                               e doa 
                        
                      teu nome  definitivo. 
                        
                        
                      
                      POESÍA  JOVEN DE PERU. Selección y  prólogo de Edgar O´hara.  Lima?:  Ediciones Revista Punto de Partida 1982.   80 p.  (Cuadernos del Taller y  Seminario, 30)  21,5 x 23 cm 
                        Ex. 10 041   Exemplar da biblioteca de  Antonio Miranda 
                        
                      TEXTO  EN ESPAÑOL 
                        
                      POEMA  
                       
                      1 
                      Un buen día 
                        Nos descubrimos en el agua 
                        Y decidimos nacer muy lentamente 
   
                        Y estamos o no estamos 
                        Nos buscan 
                        Nos preguntan 
                        Presencia sospechosa una visita 
                        Alguna llamada para nadie en el teléfono 
                        Y dónde 
                        Dónde nos habremos metido acaso sin saberlo 
                        Talvez en el jardín jugando a las estatuas 
                        O extraviando nuestros cuerpos en la calle más lejana 
                        Un destino mejor 
                        Una palabra. 
   
                        2 
   
                        Un buen día 
                        Nos descubrimos en el agua 
                        Y elegimos una mano 
                        Un ojo un cabello 
   
                        Hablamos con Casandra 
   
                        3 
   
                        Casandra 
                        El juego ha concluído 
                        Y ya la yedra guerreros unos años 
                        Subieron hasta la ventana más alta de la torre 
                        Tejiste profecías que aprendimos a leer 
                        En la dura persistencia de tu cuerpo 
                        Y a cada cual se propia historia 
                        Su propio mar oscuro 
                        Engaño enfermedad 
                        Destierro y gallo negro. 
   
                        Resulta que ahora el fuego nos aturde 
                        El agua no nos limpia 
                        Ni convierte. 
   
                             (de Un buen  día) 
   
  III 
   
                        Hablábamos del mar 
                        De su final en el punto donde se estremecen las linternas 
                        Y se confunden vertiginosos los peces moribundos 
        con los navíos y los hombres 
                        Y dijo Usted que sería así 
                        Que  todo estaba ya en la escritura de  las olas 
                        Porque así es el designio fatídico del agua 
                        El paso de los siglos 
                        De las islas. 
   
                        Hablábamos del mar aquella tarde 
                        La justa 
                        La soleada 
                        En que Usted concluía sus escritos  
                        Y viendo finalmente su trabajo propuso celebrar 
                        Seguimos entonces por la línea de la playa 
                        Hasta el recinto lustral de la taberna 
                        Ningún presentimiento 
                        Ningún vuelo de lanza o pájaro agorero 
                        Oscureció el perfil del vino y la muchachas. 
   
                        Del resto de la historia me enteré por los periódicos 
                        Por las noticias de un viejo transeúnte que lo vió 
        bajo la sombra de dos encapuchados 
                        Entonces supe que su libro no aparecería 
                        Que empezaba a sentir ya en las regiones de la piel 
                        Un pequeño mar cadalso  
                        Mar olvido 
                        Mar hoguera.  
                                         (  de Un buen día) 
                                 *** 
                                                       
   
                                               TRADUÇÃO EM  PORTUGUÊS 
                         
                      POEMA  
                        
                      1 
                         
                        Em um bom dia 
                        Nos descobrimos na água 
                        E decidimos nascer bem lentamente 
                       
                      Estamos  ou não estamos  
                        Nos buscam  
                        Perguntam-nos  
                        Presença suspeita de uma visita 
                        Alguma chamada para ninguém no telefone 
                        E onde 
                        Onde nos metemos talvez sem sabê-lo 
                        Talvez no jardim brincando com as estátuas 
                        Ou extraviando nossos corpos na rua mais distante 
                        Um destino melhor 
                        Uma palavra 
                        
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                        Em um bom dia 
                        Nos descobrimos na água 
                        E elegemos a mão 
                        Um olho um cabelo 
   
                        Falamos com Cassandra 
   
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                        Cassandra 
                        O jogo terminou  
                        E já a hera guerreiros uns anos 
                        Subiram até a janela mais alta da torre 
                        Teceste profecias que aprendemos a ler 
                        Na dura persistência de teu corpo 
                        E cada qual sua própria historia 
                        Seu próprio mar escuro 
                        Engano enfermidade 
                        Desterro e galo negro. 
   
                        Resulta que agora o fogo nos ature 
                        A água não nos limpa 
                        Nem converte 
                       (de Um bom dia)  
   
   
   
                        * 
                        Página ampliada e republicada em setembro de 2025. 
  
                      Página publicada em outubro 2008. 
                  
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